DICHOS DE SOR JUANA
ES JUSTO CASTIGO
AL QUE NECIO PIENSA
QUE LO ENTIENDE TODO
QUE A NINGUNO ENTIENDA
La sentencia en cuatro versos que corona este comentario es parte de un monólogo del personaje femenino llamado Eco en el auto sacramental El divino Narciso. Si se conoce el mito del personaje de la mitología griega llamado Narciso podrá pensarse acertadamente que mucha savia de la obra dramática sorjuanina es el amor propio, la soberbia, el orgullo, la egolatría y una palabra muy usual en la psicología contemporánea: el narcisismo. Este término en lengua coloquial equivale a creerse mucho; también a valorarse mucho, ostentar una muy alta autoestima. Todo esto, referido a la sentencia viene a decir que el necio lo es porque su narcisismo le resta la autocrítica necesaria para no creer que lo sabe todo o que, como dicen los versos, que lo entiende todo.
Quien se coloca en el plano del saber, aunque sea por esnobismo, seguramente ha experimentado aun en secreto el apetito de conocimiento, así que si en verdad lo siente, para él será muy grave el ayuno y por tanto eso, el ayuno, será su castigo. Es lo que advierten los hexámetros que dan tema a estos párrafos; reiterándolo, es justo castigo que no entienda a nadie, ni nada, quien piensa que lo entiende o lo sabe todo. La modestia es virtud de la verdadera sabiduría. El auténtico sabio no hace ostentación de su caudaloso saber.
En conclusión, a los necios (nescius en latín significa "que no sabe") que van orondos por la vida ostentando su narcisismo se les puede recordar que Sor Juana dice: "Es justo castigo / al que necio piensa / que lo entiende todo / que a ninguno entienda".
