Los alumnos han construido caretas para personal de salud, a fin de entregarlas a instituciones médicas públicas y privadas. (GUADALUPE MIRANDA)
Desde su autoaislamiento, el equipo de robótica Cerbotics 4400 del Colegio Cervantes, con ayuda de impresoras 3D, se puso a trabajar en un proyecto para elaborar caretas de protección para personal médico. Buscan donarlas a instituciones públicas y privadas que así lo requieran para hacer frente a la contingencia por el COVID-19.
El 'coach' del equipo, Max Cuevas, informó tras llegar de su viaje de Los Ángeles, California, el pasado 14 de marzo, decidieron aislarse como medida de protección. Aseguró que hasta el momento ninguno de los integrantes del equipo ha presentado síntomas de la pandemia.
Lo que sí trajeron de regreso fue por cuarto año consecutivo, el Chairman's Award 2020, considerado como el más prestigiosos de la competencia FIRST. Con él obtuvieron su pase al mundial, el cual fue suspendido por la contingencia.
Cuevas comentó que los integrantes decidieron hacer algo ante la contingencia que se vive por el coronavirus y las afectaciones que ha generado. En su búsqueda, encontraron que en República Checa la compañía Prusa 3D liberó un diseño prototipo de careta, el cual fue mejorado y rediseñado en México por el equipo especializado en diseño por computadora. Esta careta podrá ser utilizada por el personal médico que trate a los posibles infectados por COVID-19, primero en Coahuila y a un nivel mayor progresivamente.
Desde el viernes, el grupo inició su producción a baja escala, con apoyo del Colegio Cervantes que ha proporcionado los recursos necesarios.
Sin embargo, Cuevas lanza un llamado a todas esas empresas, escuelas, universidades y todo aquel que cuente con una impresora 3D, a que se una a esta iniciativa, a fin de construir el mayor número de caretas para iniciar la donación lo antes posible.
"Esto apenas lleva dos días, llevamos 10 caretas reproducidas. Queremos hacer un poquito más y hacer la entrega, porque en redes sociales nos han inundado doctores de hospitales públicos y privados solicitándolas porque no hay. Dentro de la medida estamos contestando que es una producción a baja escala, esperamos que en esta semana se llegue a conseguir una producción mayor para poder empezar las donaciones hacia los hospitales".
Cuevas estima que el costo de las caretas está entre los 30 a 45 pesos, ya que se trata de un material accesible y que podría de ser de gran utilidad para el personal que día a día lucha contra el padecimiento.
Los interesados en sumarse podrán contactarse a través de redes sociales con el equipo de robótica, quienes les proporcionarán los archivos del prototipo.
