A nivel internacional, el Banco Mundial ya anunció un apoyo de hasta 12 mil millones de dólares y la Reserva Federal de Estados Unidos bajó la tasa de interés como parte de un estímulo económico, a lo que se han sumado otros bancos centrales. (EFE)
La incertidumbre y el potencial daño por el COVID-19 se profundizó esta semana y actualmente la economía se encuentra en el punto más delicado y frágil.
Pero ayer, la calificadora Moody's señaló que si el virus chino se convierte en pandemia, es muy seguro que la economía global se vea severamente perjudicada con una contracción estimada en 0.2 por ciento. Y precisó: México ya no podrá librar la recesión.
La Bolsa Mexicana de Valores (BMV) perdió 2.26 por ciento en su principal indicador en una caída fuertemente ligada al sentimiento de incertidumbre a nivel global por la crisis del coronavirus, y no a factores internos, dijeron analistas. A su vez, el tipo de cambio escaló a 20.37 pesos por dólar, el nivel más alto del año.
En el mundo los sectores que atienden casi todas las actividades públicas como cines, organizadores de conferencias comerciales, hoteles, aerolíneas y parques de diversiones han perdido miles de millones de dólares, pues sus accionistas están buscando ahora refugio en inversiones que creen más seguras, como bonos del Tesoro de Estados Unidos, cuyo rendimiento está cayendo a casi nada.
Por su parte, la consultora de IHS Marki, que calcula PMI, indicador macroeconómico que refleja la situación económica basándose en los datos recabados por un sondeo realizado a los gestores de compras de las empresas más representativas de cada país, señaló que el índice se encuentra en su nivel más bajo desde la crisis de 2008-2009, donde las empresas mostraban inseguridad para realizar compras e invertir.
A nivel internacional, el Banco Mundial ya anunció un apoyo de hasta 12 mil millones de dólares y la Reserva Federal de Estados Unidos bajó la tasa de interés como parte de un estímulo económico, a lo que se han sumado otros bancos centrales.
En el caso de México, el secretario de Hacienda, Arturo Herrera, ya analiza la aplicación de estímulos fiscales para ciertos sectores económicos y además señaló que se prepara un presupuesto para garantizar que la Secretaría de Salud cuente con los recursos necesarios en caso de que se presente una escalada de contagios.
Precisó que para aminorar los efectos económicos del coronavirus, y a través de diálogos con los miembros del G-20, desde el punto fiscal, la secretaría dará estímulos específicamente a las empresas que han sido afectadas, como las del ramo de turismo y, tomando la referencia del 2009 con la influenza AH1N1, al sector servicios. "Hay que ser muy puntuales en cómo lo hacemos; si sobrerreaccionamos, vamos a inhibir más la actividad económica, pero si no reaccionamos lo suficiente, hay un tema... Estamos analizando el tipo de estímulos fiscales que podría haber", puntualizó.
