La violencia se disparó tras el homicidio de un activista. (ARCHIVO)
Israel atacó ayer domingo objetivos del grupo palestino islamista Yihad Islámica en Gaza y en Siria durante un pico de violencia derivado de la muerte de un miliciano en la valla de separación con la franja y a una semana de las elecciones israelíes.
La violencia se disparó después de que el Ejército israelí matara a un activista de la Yihad Islámica en Gaza la mañana del domingo cuando este colocaba un explosivo en la valla de separación y luego retiró su cadáver de la franja con una excavadora.
En la polémica secuencia, grabada y difundida por redes sociales, las tropas israelíes abren fuego contra un grupo de jóvenes que intentó recuperar el cadáver antes de que fuera arrastrado por la pala de la excavadora y retenido por Israel.
La tarde del domingo, la Yihad Islámica lanzó más de veinte proyectiles hacia Israel, que hicieron sonar las alarmas antiaéreas varias horas, y la aviación israelí respondió con bombardeos de represalia que dejaron cuatro milicianos heridos en Gaza, uno de ellos en estado crítico.
El Ejército de Israel confirmó haber atacado al mismo tiempo un complejo de la Yihad Islámica en Siria donde supuestamente se fabrican armas, además de los campos de entrenamiento y almacenes militares en el enclave palestino.
Siria afirmó ayer por la noche que ha respondido a misiles disparados desde el Golán ocupado por Israel y que estaban dirigidos contra Damasco.
Por su parte, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, convocó a su Gabinete de Seguridad para evaluar la situación de seguridad.
El Ejército suspendió las clases y las reuniones de más de 300 personas en las localidades colindantes a la Franja para este lunes y advirtió de que responderá a todo lo que "ponga en peligro a los civiles israelíes y dañe su soberanía".