Alemania y la ONU, que copatrocinaron la cumbre de Berlín del 19 de enero, tratan de cortar el apoyo militar externo a Libia. (EFE)
Los países con intereses en la guerra civil de Libia se comprometieron nuevamente ayer domingo a mantener un débil embargo de armas, cuatro semanas después de una cumbre de paz en Berlín, dijeron funcionarios de Alemania y Naciones Unidas.
Alemania y la ONU, que copatrocinaron la cumbre de Berlín del 19 de enero, reunieron a ministros de Asuntos Exteriores y otros funcionarios de una decena de países al margen de la Conferencia de Seguridad de Múnich para tratar de cortar el apoyo militar externo a las partes en guerra de Libia.
Los países involucrados incluyen a los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU, junto con Italia, Turquía y Emiratos Árabes Unidos. La reunión del domingo lanzó formalmente un comité de seguimiento internacional sobre Libia. Italia copresidirá la próxima reunión, en Roma en marzo.
En la cumbre de Berlín, los participantes acordaron respetar el embargo de armas, suspender el apoyo militar a las partes en guerra de Libia y presionarlos para alcanzar un cese del fuego.
Pero el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, ha dicho que el acuerdo ha sido violado repetidamente por las continuas entregas de armas y una escalada en los combates.
El domingo, los participantes "tuvieron una discusión sobre las recientes violaciones deplorables del embargo de armas, renovaron su determinación de contribuir a su estricta implementación y acogieron con beneplácito el progreso con respecto a un monitoreo más eficiente del embargo", dijeron los anfitriones alemanes y de la ONU en un comunicado.
El ministro alemán de Relaciones Exteriores, Heiko Maas, dijo que hablaron "muy abiertamente" sobre las violaciones recientes.
Libia está en crisis desde 2011, cuando una guerra civil derrocó al dictador Moamar Gadafi, quien luego fue asesinado.
DE ENERO
En la Cumbre de Berlín, realizada en enero de 2020, se acordó alto el fuego y embargo de
armas.
