El receptor de los Jefes, Tyreek Hill, atrapa sin marca un pase de 44 yardas en el último cuarto.
La interrogante que carcomerá a los backs defensivos de San Francisco durante sus vacaciones es quizá la misma que pasó por la mente de Patrick Mahomes en los segundos que cambiaron el Super Bowl ayer.
¿Cómo le hizo Tyreek Hill para estar tan abierto para atrapar ese pase?
Anulado durante más de tres periodos por una defensiva de los Niners que no permitió ninguna jugada de muchas yardas esta temporada, Mahomes y los Jefes finalmente encontraron un espacio. Fue un pase de 44 yardas a Hill, el veloz y pequeño receptor que superó no uno, ni dos, pero tres defensas en la jugada de tercera oportunidad y 15, justo cuando Kansas City empezaba a perder las esperanzas en el cuarto periodo.
Ese fue el punto de inflexión en el triunfo de Kansas City por 31-20, la clave para un último cuarto en el que anotaron 21 puntos, desencadenando la tercera remontada de los Chiefs de un déficit de dobles dígitos esta postemporada.
"El coach Reid me dijo que siguiera perseverando, que continuara creyendo en mi visión y que lo hiciera", dijo Mahomes.
Los 49ers llegaron habiendo permitido solo ocho pases completos esta temporada en pases de más de 20 yardas _la mejor cantidad de cualquier equipo en la NFL en 14 temporadas. Por más de 53 minutos en este, estaban cumpliendo con las expectativas.
Acosando a Mahomes desde el fondo, nunca dejándolo libre en los costados, mucho menos darle oportunidad de un gran lanzamiento, los Niners estaban en completo control. Forzaron dos intercepciones a Mahomes.
Abajo por 10, Mahomes lanzó un par de pases incompletos, incluyendo uno que primero determinaron como una atrapada de Hill pero que fue anulada tras revisar la jugada. Fue tercera y 15 en la yarda 35, una parada más y prácticamente hubiera sido el final del juego.
Mahomes retrocedió 13 yardas después de esa jugada, volteó al campo, después a su izquierda y lanzó el pase más largo de la noche. Hill se detuvo en seco y sostuvo el balón.
Cuatro jugadas después, los Chiefs habían recortado la diferencia a tres puntos, la defensiva de San Francisco se vio aturdida y ya no pudo recuperarse.
En menos de ocho minutos su déficit de 10 puntos se convirtió en ventaja de 11 y en el aniversario 100 de la NFL Kansas City ganó su primer título de Super Bowl en 50 años.
