Las nevadas que cayeron en la zona serrana los primeros días del año darán un fuerte respiro a la generación y propagación de incendios forestales.
Daniel Trujano, gerente de la Conafor en Durango, señaló que al menos el respiro les durará hasta el mes marzo. "Lo mejor que le pudo haber pasado al bosque duranguense es la caída de nieve porque de esa manera el agua no corre, sino que se filtra al subsuelo y provoca una capa grande de humedad".
Esta humedad provocará que de llegarse a registrar algunos incendios forestal, al menos no se propagarán mucho y se retardan en su avance, lo que le da tiempo a los brigadistas para llegar para apagarlos.