Tsai Ing-wen (i) fue reelegida como presidenta de Taiwán con un un 57.13 por ciento de los votos. (EFE)
La presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen, aseguró que el resultado de las elecciones en el país, en las que ha logrado un rotundo triunfo sobre el candidato pro chino, Han Kuo-yu, muestran que los taiwaneses no aceptan las amenazas de China.
"Los resultados demuestran que cuando nuestra soberanía y democracia están amenazadas los taiwaneses responden", afirmó Tsai en su primera comparecencia ante los medios tras su victoria electoral en el cuartel general del Partido Progresista Democrático (PPD).
La reelegida presidenta instó a Pekín a "abandonar las amenazas e intimidaciones" en relación con el Estrecho de Formosa, que separa la isla de la China continental, y recalcó que las elecciones "han dejado claro como el agua" que Taiwán nunca admitirá esas prácticas.
Tsai aseguró que su Gobierno ha mantenido en los últimos cuatro años una "actitud no provocativa" respecto al Estrecho, pero aseveró que, pese a ello, China les ha "forzado a aceptar condiciones inaceptables" en una "creciente presión".
Debido a ello, añadió, han "tenido que establecer capacidades nacionales de Defensa para mantener la seguridad" en el corredor marítimo que les separa de China, surcado con frecuencia por buques militares de Estados Unidos.
Recalcó que tanto China como Taiwán tienen "la responsabilidad de mantener pacíficas" sus relaciones, así como la "estabilidad" en el Estrecho, y subrayó que "la democracia y el diálogo" son las claves para una "relación estable y duradera".
Tsai dijo que los resultados muestran que los taiwaneses rechazan "el modelo de un país, dos sistemas" que aplica Pekín para Hong Kong y que propone también para la isla.
Respecto al cada vez mayor aislamiento internacional de Taiwán, que ha perdido siete aliados en los últimos tres años, la presidenta subrayó que el país "es un miembro indispensabl"e para "ayudar en estabilidad regional".
