Agustín Cantú fue consagrado presbítero por el obispo. (BEATRIZ A. SILVA)
El Santuario del Perpetuo Socorro en Torreón llevó a cabo la ordenación sacerdotal para la Congregación del Santísimo Redentor (redentoristas), misma que atiende el santuario antes mencionado.
Agustín Cantú, originario de Monterrey, fue consagrado presbítero por el obispo de la Diócesis de Torreón, monseñor Luis Martín Barraza Beltrán.
Familiares, amigos y religiosos de La Laguna se congregaron a esta celebración en la parroquia del Perpetuo Socorro para ser testigos de este acto.
En el mensaje dirigido por parte del obispo de Torreón, mencionó el compromiso que tendrá el nuevo sacerdote, quien deberá cumplir a través de la caridad pastoral que promueve el papa Francisco, cualidades que son indispensables para llevar una vida de servicio hacia la comunidad. "No puede haber sacerdote si no hay caridad pastoral, es su oficio", sostuvo Barraza.
Citó que son tres las marcas que consagran esta caridad pastoral: la pobreza, el sufrimiento y caridad.
Indicó en su sermón que "estamos en frente a una hermosa obra de quien aspira a este sacramento". Habló sobre los nuevos compromisos que tendrá que asumir ahora con su ordenación, haciendo mención de los riesgos latentes que existen al trabajar en las comunidades que los pueden distraer de su ministerio o que los desestabilicen de sus tareas.
La consagración del presbítero es una de las órdenes sacerdotales mayores que otorgan las iglesias católica, ortodoxa y anglicana. Entre sus funciones principales tiene celebrar misa, anunciar el Evangelio, administrar los distintos sacramentos (excepto la confirmación) y orientar espiritualmente a sus fieles.
