
Rafael Dudamel fue presentado ayer como el técnico del Atlético Mineiro. (ESPECIAL)
El venezolano Rafael Dudamel explicó ayer en su presentación como nuevo entrenador del Atlético Mineiro brasileño los motivos que le llevaron a abandonar la Vinotinto, entre ellos la falta de "tranquilidad para trabajar" y una "ruptura" de entendimiento con los directivos de la federación.
"El término de mi ciclo en la selección no fue como yo quería, pero entendí y sentí que ya había una ruptura con los directivos en la comunicación y el respeto que no permitían, que no hacían conveniente, continuar en la selección porque no había tranquilidad para trabajar", confesó Dudamel en su primera rueda de prensa en Belo Horizonte.
El entrenador, que firmó un contrato por dos temporadas en la que será su primera experiencia lejos de su país, reveló que la llamada del Mineiro le "alegró mucho" y que en las primeras conversaciones pudo sentir "el valor, el respeto al ser humano y al profesional".
"Sentí rápidamente el profesionalismo, la sinceridad de un proyecto, de una gran institución como el Atlético Mineiro. Me sentí respetado, valorado y me saltó un 'click' en la cabeza", aseguró.
Evitó pronunciarse sobre la crisis económica, social y política que vive su país y que ha obligado a unos cuatro millones de venezolanos a huir a otras partes del mundo y afirmó que "siempre quiere lo mejor" para Venezuela.
"Mejorar y recuperar el país depende de los venezolanos con mucho esfuerzo. Estamos trabajando por ser un país cada día mejor", explicó.
Dudamel, que fue seleccionador de Venezuela durante casi cuatro años, confía en terminar su contrato con su nuevo club, para el que tiene "metas muy bien marcadas" que, según dijo, conseguirán si trabajan "con mucha intensidad".
"Mi mensaje para el aficionado es que Dudamel vino para ganar.
¿Cómo? Con tiempo. El tiempo para alcanzar los triunfos depende de la razón, no de la emoción", analizó.