Stokes recauda dinero para pagar por un abogado, mientras el animal se encuentra en un refugio. (INTERNET)
Matt Stokes, de Waterloo, Iowa, está luchando por la custodia de un coyote salvaje, insistiendo en que es su animal de apoyo emocional.
Stokes cuenta que adoptó al coyote desde que éste era un cachorro y que le construyó una guarida en su viejo cobertizo, e incluso les mintió a sus vecinos diciéndoles que se trataba de un perro pastor alemán, sin embargo, Matt se mudó y tuvo que dejar al animal.
"Seguí poniendo comida y agua para él. Fueron dos semanas que estuvo aquí solo", cuenta, cita el New York Post.
Luego los vecinos vieron al coyote, de nombre Drifter, y llamaron a control de animales, ya que es ilegal mantener a un coyote como mascota en este estado. Ahora no obstante, Matt quiere convencer al Departamento de Agricultura de Iowa de que le devuelvan a Drifter, alegando que es su animal de apoyo emocional y por tanto, su compañero incondicional.
"Si no fuera por él, probablemente me faltaría el dedo del pie, el pie o la pierna. Tenía que asegurarme de poder cuidarme para poder cuidar de él", afirma el hombre, quien también tiene ya un certificado médico que avala que Drifter le ayuda con su depresión y ansiedad.
"Nunca ha sido salvaje, siempre ha sido manso. Nos recostamos en el sofá los sábados por la tarde y tomábamos una siesta juntos. Él es mi amigo", agrega Stokes.
DA.
