La rotación de personal es uno de los principales problemas en la Central de Abastos de Torreón.
Comerciantes del Mercado de Abastos de La Laguna cierran 2019 con un incremento en las ventas de un 30 por ciento.
No obstante, expresan incertidumbre para el año entrante, como resultado de la política económica del gobierno federal.
Según lo declaró Eri Ramiro Amezcua Fletes, expresidente de la Unión de Comerciantes del Mercado de Abastos de la Laguna, las ventas repuntaron significativamente desde finales de noviembre, lo cual equilibró la economía del mercado en general.
Expresa que la central de abastos de Torreón sigue como una de las más importantes del norte del país ya que sus instalaciones son cada vez más funcionales y seguras para los comerciantes y público en general.
Dice que los retos para el año entrante son muchos: "Pero prevalece la incertidumbre por el rumbo que pueda tomar la economía ante las acciones que tome el gobierno federal y que hasta ahora no han sido acertadas, de acuerdo con los resultados".
Dice el representante de los comerciantes del Mercado de Abastos de la Laguna que "desde el momento en que el gobierno federal decidió otorgar recursos para apoyar a los 'ninis' por ejemplo, se perfilaron sus preferencias" respecto a la atención de programas que le generen imagen, más que apoyar la inversión y generar empleos formales.
LOS PROBLEMAS
Señala que curiosamente, el Mercado de Abastos de la Laguna termina este año con una fuerte problemática relacionada con la falta de mano de obra.
Indica que hay rotación de trabajadores.
"Los empleados que conseguimos trabajan unos meses y luego se van".
Argumenta que tal vez es consecuencia de los horarios que manejan y son desde las 6 de la mañana para terminar a las 3 de la tarde o porque se trabaja los días festivos.
Señala que tanto a nivel estibadores como en lo referente a las áreas administrativas, "es el mismo problema. Lo vivimos recientemente ya que apenas pagamos el aguinaldo, las personas trabajaron una semana y ya no se han presentado a laborar".
La gente se va en busca de empleo a las maquiladoras en la franja de la frontera porque cree en las prestaciones como transporte, bonos de productividad, servicio de comedor.
Para el empresario, "no queda más que seguir trabajando y con la confianza de hacer el esfuerzo por mantener las actividades económicas pese a que impositivamente también la carga no será ligera. Genera temor que mientras el presidente López Obrador dice una cosa, el secretario de Hacienda expresa otra.
