Drew Brees celebra tras romper el récord de Payton Manning de 539 pases de anotación en campaña regular. (ARCHIVO)
Drew Brees se convirtió en el mariscal de campo con más pases de anotación (en temporada regular) en la historia de la NFL, al lanzar para cuatro touchdowns, y los Santos de Nueva Orleáns aplastaron ayer 34-7 a los Colts de Indianápolis.
El envío con el que Brees superó el récord de 539 pases de anotación de Peyton Manning llegó en el tercer cuarto. El mariscal de campo de 40 años encontró al ala cerrada Josh Hill, para un avance de cinco yardas hasta las diagonales, ante Indianápolis, precisamente el equipo en el que Manning jugó sus campañas más brillantes.
Con su siguiente pase en el partido, Brees llegó a 541 envíos de anotación. Completó para una ganancia de 28 yardas con el quarterback reservista Taysom Hill, quien llegó a las diagonales y colocó el marcador en 34-0.
En su 19na temporada, Brees posee ya los récords de la NFL de más pases completos y yardas de por vida. Llegó al encuentro del lunes con 6.792 envíos completos para 72.577 yardas.
TREMENDO PARTIDO
Y en el partido, estableció además una marca de mayor porcentaje de envíos completos en un partido. Fueron 29 de 30 (96,7 por ciento), para un total de 307 yardas, antes de que Teddy Bridgewater lo sustituyera en el cuarto periodo.
La marca anterior se remontaba a la campaña pasada, cuando el mariscal de los Cargadores, Philip Rivers, completó 28 de 29 pases (96,6 por ciento).
Una vez que completó el pase con el que rebasó a Manning, los compañeros de Brees en la ofensiva de Nueva Orleáns lo rodearon para felicitarlo por el hito. El mariscal de campo abrazó al entrenador Sean Payton a un costado del terreno. Luego, dirigió saludos y besos al público, que respondió con una atronadora ovación.
Los Santos (11-3), quienes se habían coronado ya en la División Sur de la Nacional, siguieron en la pulseada con San Francisco (11-3) y Green Bay (11-3), por uno de los primeros dos puestos de la conferencia para los playoffs.
Indianápolis (6-8) quedó oficialmente eliminado de la postemporada, luego de sufrir su cuarta derrota consecutiva y la sexta en siete compromisos.
