Ezekiel Elliott logra una de sus dos anotaciones en la paliza de Vaqueros 44-21 sobre los Carneros. (AP)
Dak Prescott lució confundido en el lanzamiento de la moneda, antes del partido. Luego, compensó de sobra ese caótico episodio con el árbitro Walt Anderson.
Prescott lanzó dos pases de anotación, Ezekiel Elliott aportó otro par de touchdowns mediante sus acarreos y los Vaqueros de Dallas aplastaron ayer 44-21 a los Carneros de Los Ángeles.
El mariscal de campo de Dallas hizo pensar a muchos que los Vaqueros buscarían inexplicablemente despejar en el comienzo de cada una de las dos mitades del partido. Ganó el "cara o cruz" para definir qué equipo recibiría el balón en la primera serie del partido.
Eligió "patear", antes de aclarar que prefería "posponer" para la segunda mitad la oportunidad de comandar el primer ataque. El capítulo fue la comidilla en las redes sociales, en momentos en que los Vaqueros arrastraban una racha de tres derrotas consecutivas, su segunda en la campaña.
El árbitro esclareció la confusión y Dallas (7-7) no tardó en aclarar también que enderezaría el camino. Los campeones defensores del Este de la Conferencia Nacional permanecieron empatados en la cima de esa débil división con las Águilas de Filadelfia, a quienes enfrentarán la próxima semana.
Los Carneros (8-6), que necesitaban ya de ayuda para colarse en los playoffs, dieron otra pobre exhibición, una semana después de su partido más impresionante de la campaña, una victoria sobre Halcones Marinos de Seattle.
Prescott completó 15 de 23 intentos para 212 yardas, envió dos pases de anotación y no tuvo intercepciones, mientras que el ataque terrestre dominó a la defensiva de los Carneros al sumar 263 yardas totales, incluyendo 131 y una anotación del corredor suplente Tony Pollard,; por otro lado Ezekiel Elliott totalizó 117 yardas y anotó en par de ocasiones.
Con una victoria la semana entrante ante las Águilas, los Vaqueros asegurarían su lugar en la postemporada.