La Unión Europea (UE) urgió este miércoles a Nicaragua a liberar a los opositores detenidos en la occidental ciudad de Masaya. (ARCHIVO)
La Unión Europea (UE) urgió este miércoles a Nicaragua a liberar a los opositores detenidos en la occidental ciudad de Masaya y a levantar el sitio a la iglesia de esa entidad, ya que representa una violación contra los derechos fundamentales de los ciudadanos nicaragüenses.
Al menos 16 activistas y miembros de la Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB) fueron detenidos la semana pasada cuando intentaron llevar víveres a un grupo de madres que inició una huelga de hambre en la iglesia de San Miguel Arcángel de Masaya para exigir la liberación de sus hijos, presos políticos.
La justicia ordenó el lunes pasado la prisión preventiva para los detenidos, acusados de tenencia de armas de fuego y de planear “actos terroristas”, mientras desde hace una semana el templo está rodeado por policías que impiden el acceso a cualquier persona.
La UE, a través de su jefa de la diplomacia, Federica Mogherini, llamó al gobierno de Nicaragua y a las fuerzas del orden a liberar a los detenidos y a retirar los cargos, así como levantar el sitio de la iglesia.
“Las detenciones y el asedio de las fuerzas policiales a la iglesia de Masaya, a 30 kilómetros al sureste de Managua, representan una violación de los derechos fundamentales y un grave revés para el proceso político", insistió la UE en un comunicado divulgado en su página web.
Mogherini señaló que la acción contra los activistas de la UNAB, ya fueron acusados de tráfico de armas, “es un serio revés para el proceso político que transmite una señal negativa sobre la voluntad del gobierno de trabajar para lograr una salida pacífica y democrática de la crisis.
Ante la situación, la UE instó al gobierno del presidente Daniel Ortega a liberar y retirar los cargos a los detenidos, levantar el estado de sitio que mantiene en la iglesia de Masaya y garantizar el pleno respecto de los derechos constitucionales de los nicaragüenses.
Entre esos derechos la libertad de expresión, de reunión, de religión y de protesta pacífica, como se había comprometido en virtud de los acuerdos alcanzados con la Alianza Cívica en marzo pasado.
La UE cree que sólo con la plena aplicación de esos acuerdos, el diálogo inclusivo y creíble y una reforma política y electoral que cumpla los estándares internacionales será posible resolver la actual crisis en Nicaragua.
La oposición nicaragüense lanzó recientemente una nueva campaña de presión contra el gobierno de Ortega, tras las violentas protestas del año pasado exigiendo la renuncia del mandatario sandinista.
El objetivo es presionar por la liberación de más de 130 opositores presos durante la represión de aquellas protestas, que dejaron al menos 328 muertos y unos 88 mil exiliados, según cifras de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
