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Las palabras tienen la palabra

Imagínese el origen

Juan Recaredo

Para conocer el origen de las palabras, a veces hay que ponerle al asunto un poquito de imaginación, aunque sin salirse de la lógica. Por ejemplo, el verbo pagar. Proviene del latín pacare que significa apagar, o apaciguar, y bueno, pues si usted quiere apaciguar a ese acreedor que le está cobrando insistentemente, la mejor manera de apaciguarlo, de calmar sus inquietudes, es pagarle. ¡páguele y verá que lo deja en paz!

Una gran cantidad de vocablos existe en nuestro idioma y que tal vez con un poco de sentido común podemos saber de dónde proceden y aún lo que significan o por qué se usan de esa determinada manera.

Yo sabía que daktilos en griego significa dedo. Sabiendo eso, no es difícil imaginarse que un dátil, el fruto de la palma, tiene la forma de un daktilo o sea que parece un dedo humano y por lo tanto resulta logiquísimo que se llame así: dátil.

De la misma raíz griega derivan desde luego las huellas dactilares que son las que dejan los ladrones con sus dedos en el cuerpo del delito y son también las que nos hacen plasmar en un documento cuando sacamos la visa para viajar al extranjero.

Habrá escuchado usted esa expresión de que algo que se hace pian, pianito o de plano pianísimo quiere decir que ese algo se hace suavemente o muy quedito. Y luego se pregunta uno qué relación hay entre el piano -el instrumento musical- y hacer algo así, quedamente o suavecito. Si me permite le contaré rápidamente la historia, simplificada.

El piano lo inventó un señor italiano que se llamaba Bartolomeo Cristófori, hace más de 300 años. El instrumento empezó siendo una cítara, un instrumento de cuerda que se tocaba con las manos, luego fue el salterio que es como una cítara, pero en forma de trapezoide. El proceso llevó mucho tiempo.

Luego aparecieron los harpsicordios, pero se quería tener un instrumento donde los dedos no estuvieran en contacto con las cuerdas. Así nació el clavicordio que tenía unas teclas y la cuerda era rasgada con un clavo o una aguja. Ahí es donde aparece Cristófori que hacía una especie de clavicordio en donde la cuerda era hecha vibrar con un martillito de madera, el cual permitía graduar la intensidad del sonido.

Ese fue el primer paso para llegar al piano que al principio Cristófori llamó clavecín col piano e forte, o sea: clavecín con suave y fuerte, que después se convirtió en pianoforte y luego quedó en lo que se llama actualmente el piano.

Soy Don Juan Recaredo… compártame sus dudas y comentarios: [email protected], Twitter: @donjuanrecaredo.

ME PREGUNTA:

Carlos Niño: "¿Qué es una cimitarra?

LE RESPONDO:

Una cimitarra es una especie de sable que usaban los turcos y los persas para pelear.

LAS PALABRAS TIENEN LA PALABRA:

Es muy posible recibir una puñalada sin adulación, pero es muy raro recibir una adulación sin puñalada.

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