La economía de la ciudad está en una recesión técnica, tras contraerse por segundo trimestre seguido. (EFE)
La actividad ha caído en los distritos comerciales de Hong Kong después de más de cuatro meses de protestas.
El gobierno anunció el jueves que la economía de la ciudad está en una recesión técnica, tras contraerse por segundo trimestre seguido.
Las filas antes habituales de compradores chinos ante las tiendas de lujo han desaparecido.
Las joyerías no tienen clientes, y un sastre había recurrido a sus ahorros para pagar a los trabajadores de su tienda.
También sectores asociados, como el de transportes, estaban acusando el golpe.
Las previsiones apuntaban a una contracción de la economía en 2019, sin indicios de un cambio de tendencia.
Las protestas han afectado en ocasiones a infraestructuras importantes, cerrando el aeropuerto, la red de metro, calles importantes y túneles.
La operadora ferroviaria MTR, propiedad del gobierno, ha empezado a cerrar los servicios de metro antes de lo habitual por las tardes, reduciendo aún más el gasto del consumidor.