Pedro Luna Solís, regidor de extracción cenecista, explicó que, aún cuando en Gómez Palacio no hay riego de temporal, se observa una diferencia considerable con respecto a las cosechas del maíz que se han obtenido en este año, que apenas alcanzan 30 toneladas por hectárea, cuando en años anteriores, lluviosos, eran de hasta 50 toneladas. (FABIOLA P. CANEDO/EL SIGLO DE TORREÓN)
El retraso en la temporada de lluvias ha afectado considerablemente a la producción del campo, que se ha visto considerablemente mermada y por abajo de la media debido a la falta de agua, lo que sumado a la eliminación de apoyos federales, es el inicio de una crisis agrícola en la región.
Pedro Luna Solís, regidor de extracción cenecista, explicó que, aún cuando en Gómez Palacio no hay riego de temporal, se observa una diferencia considerable con respecto a las cosechas del maíz que se han obtenido en este año, que apenas alcanzan 30 toneladas por hectárea, cuando en años anteriores, lluviosos, eran de hasta 50 toneladas.
El líder campesino dijo que en este primer año del gobierno federal se redujeron considerablemente los apoyos al campo, por lo que cerca de la mitad de los programas que existían fueron cancelados, a pesar de que había algunos muy nobles que aportaban subsidios a los caprinos o a las mujeres, sin necesidad de que intervinieran organizaciones.
"Ante esas cancelaciones, ha dejado de circular mucho dinero, había programas muy generosos para las mujeres del campo, que se organizaban en grupos de trabajo y solicitaban apoyos para empleo, para industrias, hoy esté gobierno federal lo suspendió y se han acabado muchas posibilidades, es importante que el gobierno federal se sensibilice para que el recurso llegue al campo", comentó.