Pensó que no era nada importante y tomó medicina contra el dolor, pero en realidad era un tumor. (INTERNET)
Gurcharan Kaur es una mujer británica de 30 años que vive en Wolverhampton, quien pensó que la picazón que sentía en un ojo era una reacción alérgica, sin embargo, tras comenzar a experimentar dificultad para parpadear y que su ojo comenzó a hincharse, decidió dejar de ignorar los síntomas y hacerse una revisión profesional.
Tres semanas no prestó atención al malestar y quiso eliminar el dolor con antihistamínicos, hasta que decidió hacerse una prueba ocular estándar cuando, sin planearlo mucho, pasó cerca de un estudio óptico.
Ahí le dijeron que tenía daños en el nervio óptico de su ojo izquierdo y subsecuentes estudios encontraron un líquido anormal en su cerebro y un pequeño quiste coloide, un tumor de crecimiento lento, justo en el centro de su cerebro, detrás de su ojo izquierdo.
Kaur se sometió a una cirugía, le extrajeron el tumor y ahora se recupera con medicamentos especiales contra la epilepsia. "He temido por mi vida. Solo quiero advertir a las personas sobre ignorar lo que pueden ser síntomas bastante graves. [...] Los médicos me dijeron que si no hubiera ido, (el tumor) habría crecido y habría comenzado a tener convulsiones", comenta la joven, cita el diario The Sun.
DA.