El Gobierno ha ordenado que todas las milicias se integren en las fuerzas regulares.
Cientos de personas se manifestaron en la llanura de Nínive, en el noreste de Irak, contra la decisión del Gobierno de retirar las milicias chiíes y reemplazarlas por fuerzas regulares, tras el papel destacado que tuvieron en la lucha contra el grupo terrorista Estado Islámico (EI).
El Gobierno del primer ministro iraquí, Adel Abdelmahdi, ha ordenado que todas las milicias, incluida la poderosa Multitud Popular (integrada principalmente por brigadas chiíes), se integren en las fuerzas regulares y se sometan a la supervisión de las autoridades antes de final de mes.
Los manifestantes protestaron este viernes porque la decisión afecta también a la Brigada 30, integrada por la minoría étnica shabak, de fe chií, que defendió a este grupo perseguido por los yihadistas del EI cuando irrumpieron en la región de Nínive a mediados de 2014.
Los habitantes de la llanura, donde se encuentra la ciudad de Mosul, antigua "capital" del EI en Irak, exigieron que las milicias permanezcan desplegadas y rechazaron el regreso de las fuerzas de seguridad, que en su momento fueron acusadas de haber permitido la ocupación de toda la región por los extremistas suníes.