Señaló que no se presentará a la reelección en 2020, su renuncia a la presidencia de su partido y que acepta que enfrentará un juicio político. (EFE)
La presión de nueve días en las calles concluyó ayer con el anuncio del gobernador de Puerto Rico, Ricardo Rosselló, de que no se presentará a la reelección en 2020, su renuncia a la presidencia de su partido y que acepta que enfrentará un juicio político.
Rosselló, a través de un mensaje, dijo haber comprendido a la población durante el anuncio de su decisión, mientras que la oposición señaló que sigue sin escuchar el reclamo del pueblo, en una jornada en la que las manifestaciones continuaron con el objetivo de que el gobernador dimita.
Las calles, después del anuncio, se llenaron de vehículos que sonaban sus bocinas, mientras que continuaban concentrados manifestantes a la entrada de La Fortaleza, la sede del Ejecutivo y residencia del gobernador.
Rosselló tiene hoy una nueva prueba para mantenerse en el cargo con la manifestación y paro nacional convocada, que, de momento, ha supuesto que Plaza Las Américas, el primer centro comercial del Caribe, anuncie que no abrirá sus puertas por la cercanía de la concentración.