Los cuidados paliativos corresponden a todas las atenciones totales de los enfermos cuyo tratamiento no tiene efectos significativos y la enfermedad se torna degenerativa. (ARCHIVO)
Cuando un amigo o familiar atraviesa una enfermedad en fase terminal o muy avanzada, los que se encuentran a su alrededor se cuestionan cómo actuar y qué hacer para cumplir sus deseos para procurar que sus últimas horas sean agradables y lo más tranquila posibles, siendo los cuidados paliativos una opción para llegar a una muerte digna.
Los cuidados paliativos corresponden a todas las atenciones totales de los enfermos cuyo tratamiento no tiene efectos significativos y la enfermedad se torna degenerativa, conlleva a invalidez e irremediables fatales, como el VIH-SIDA, cáncer, cirrosis, esclerosis múltiple, parkinson, alzheimer y enfermedades cardiovasculares avanzadas. Los cuidados paliativos posibilitan el control del dolor, y atención psicológica, social y espiritual, cumpliando los últimos deseos del efermo.
Les otorga el control de cómo quieren llevar a cabo el proceso de su muerte, por ejemplo:
-Elegir si desea ser informado de su enfermedad o no.
-Buscar una segunda opinión.
-Seleccionar apoyo religioso, espiritual, moral o ninguno.
-Dónde sea morir (hospital o casa).
-Quiénes serán sus acompañantes.
-Quiénes pueden acceder a su información clínica.
-Ser o no donante.
Para garantizar el proceso correcto de la muerte digna, la Secretaría de Salud y la Fundación pro derecho a morir dignamente, definen estas atenciones como una garantía que cada uno tiene en ejercer su autonomía al final de su vida, así como los cuidados paliativos como el medio que garantiza el cumplimiento de la primera.