La Casa Iguamira es una alternativa para el desarrollo de los niños mediante el arte y el juego.
Son ya dos años y medio que se creó la Casita de Artes y Juegos Iguamira, proyecto que nació ante la falta de espacios dedicados a las niñas y los niños, al derecho del juego sin el afán mercantil y lucrativo, buscando alternativas que contribuyan a su desarrollo motriz, emocional, creativo, afirmó Raúl Esparza cuenta cuentos y promotor lagunero.
"Nosotros damos cursos, es una ludoteca, no es un centro cultural, no es una guardería y el espacio está orientado al juego y al juguete, principalmente, aunque están incluidas, áreas de literatura, representación de teatro con títeres, artes plásticas, donde se trabaja con pintura, modelado, recorte pagado, pero en ningún caso son clases" enfatizó.
Al lugar pueden asistir niños de cero a doce años, los cuales deben estar acompañados por sus padres, pues la idea es que interactuen con ellos, pues hay juegos que los padres conocen y los menores no. Se pide una mínima cantidad, por el acceso, la cual que sirve para el sostenimiento de la casa y el servicio se ofrece de lunes a martes de las 17:00 a 20:00 horas y los sábados de 10:00 a 14:00 y de 17:00 a 20:00 horas.
"Es como estos lugares que hay en las grandes tiendas, en donde los niños van y juegan con las maquinitas, pero aquí no las hay juegos tradicionales, manuales que no son digitales, electrónicos".
Además de contar con el espacio fijo, cada 15 días los voluntarios visitan algunos sectores de la ciudad, y se instalan en los espacios públicos para ofrecer a los niños la oportunidad de conocer juegos "diferentes", pues las nuevas generaciones se entretienen sólo con la tecnología.
La casita de Arte y Juegos, se ubica en la privada Juan Pablo, número 443, en el Centro, entre las calles Leona Vicario y Ramón Corona y para cualquier información pueden consultar en la página de Facebook: Casita Iguamira o comunicarse al teléfono celular 8711-22-11-70
