El acuerdo entre las firmas había generado reacciones positivas, pero al final se cayeron las negociaciones. (ARCHIVO)
La decisión sorpresiva de Fiat Chrysler de retirar una oferta de compra de la automotriz francesa Renault sacudió a la industria, pero ambas partes hicieron declaraciones cuidadosas el jueves que permitían vislumbrar la posibilidad de que se retomen las negociaciones.
El acuerdo _que, de haberse concretado, habría creado el tercer fabricante automotor más grande del mundo_ generó reacciones positivas en el sector desde que se anunció la semana pasada. Las negociaciones fracasaron después de que el gobierno francés, el principal accionista de Renault, pidió cinco días más para obtener el apoyo de Nissan, el socio japonés de la alianza desde hace tiempo.
Fiat Chrysler citó las "condiciones políticas en Francia" como uno de los motivos para retirar su oferta. Al parecer las autoridades no estaban prevenidas. Culparon a Fiat Chrysler por "presionar demasiado" para decidir sobre la oferta. Luego suavizaron su tono, indicando que podría haber un espacio para negociar.
"No hemos cerrado ninguna puerta", dijo un funcionario del Ministerio de Economía de Francia al responder a una pregunta sobre si podría alcanzarse un acuerdo en algún momento con Fiat Chrysler. El funcionario comentó sobre el tema bajo la condición de no dar su nombre.
Si bien Renault expresó su decepción por la oportunidad perdida, también habló de ello en tiempo presente, diciendo que veía "la oportunidad en un momento preciso, con una lógica industrial convincente y un gran mérito financiero, y que daría lugar a una central automotriz mundial con sede en Europa".
En Italia, un representante sindical opinó que la cancelación de la oferta es "una posición táctica dura para eliminar la rigidez franco-japonesa y reanudar las negociaciones".
