Personas de la diversidad sexual destacan que mientras exista la exclusión en la ley del estado la discriminación continuará.
De nuevo los diputados locales negaron aprobar el matrimonio igualitario. Así, "cientos de parejas del mismo sexo siguen en la indefensión porque hay quienes legislan con la biblia", recriminó Ezequiel García, representante de la comunidad gay de Durango.
El jueves pasado sesionó la Comisión de Derechos Humanos, a la cual solo acudieron tres diputados: uno del Partido Acción Nacional (PAN), otro del Partido Revolucionario Institucional (PRI), y uno de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena).
Tras analizar dos iniciativas sobre el matrimonio igualitario que se encontraban en la comisión, solo acordaron volverlas a revisar para tomar lo mejor de ambas. Sin embargo, no acordaron una fecha para hacerlo, reprochó el activista.
En entrevista comentó que cientos de parejas del mismo sexo esperaban esta sesión, puesto que los ánimos eran positivos, empero este nuevo retraso tiene conmocionados a los integrantes de la comunidad gay.
En la sesión de la comisión hace dos días, la diputada Alicia Gamboa pidió que el matrimonio igualitario no se llame matrimonio, pero los asesores del H. Congreso del Estado le informaron que ello es imposible.
Sobre el matrimonio igualitario, en el 2015 la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) estableció en la resolución 1a./J. 43/2015 que "la ley de cualquier entidad federativa, que por un lado considere que la finalidad de aquel es la procreación y/o que lo defina como el que se celebra entre un hombre y una mujer, es inconstitucional".
Ante esta respuesta la diputada solicitó que de nuevo se lleven a cabo consultas o foros con la población, mismos que también le recordaron, ya se realizaron en el 2016.
Cabe mencionar que la sesión no contó con el representante del Partido del Trabajo (PT), que es Rigoberto Quiñones Samaniego.
Ezequiel García sostuvo que el comportamiento conservador de los diputados locales tiene un impacto directo en el bienestar de las familias homoparentales y lesbomaternales, así como en las parejas del mismo sexo que esperan casarse para brindar seguridad social y acceder a otros derechos, que hasta ahora en Durango no son realidad.
"Creen que nada más queremos hacer una boda, pero se trata de las cientos de familias de la diversidad sin garantías, sin protecciones, sin certeza jurídica. Seguiremos en la lucha, que no termina porque los diputados digan que no", advirtió.
