El polémico dueño de los Tiburones Rojos, Fidel Kuri Grajales, deberá saldar las deudas antes de confirmar su permanencia.
Los Tiburones Rojos de Veracruz habría realizado el pago de 120 millones de pesos a la Liga MX, para mantenerse en Primera División, luego de perder matemáticamente la categoría durante el torneo Clausura 2019.
Sin embargo, el depósito no garantiza que los Tiburones Rojos en automático sigan en el máximo circuito. Por reglamento, la institución debe estar libre de adeudos y con finanzas sanas.
RESOLUCIÓN
Será hasta el próximo 20 de mayo, durante la junta de dueños, en que se emitirá un fallo sobre el conjunto escualo, propiedad del polémico Fidel Kuri Grajales.
La empresa auditora de la Federación Mexicana de Futbol (FMF), Ernest & Young, iniciará la investigación correspondiente sobre la procedencia de los recursos con los que fue liquidado el pago.
¿QUÉ MÁS NECESITAN?
Primero deberán saldar las deudas que arrastran y que se evidenciaron en el Clausura 2019.
La razón por la que le descontaron cuatro puntos (y dos pendientes) fue por no pagar 244 mil 500 dólares al Montevideo Wanderers, por los derechos de formación del jugador Matías Santos.
Y se agregan los 15 mil dólares de multa por la FIFA.
Asimismo, Kuri arrastra un adeudo de premios económicos a jugadores, que ascienden a casi 20 millones de pesos tras la salvación de la temporada anterior.
"Hay más tiempo que vida... Regresé a este equipo a Primera y no voy a dejar que se vaya", advirtió al final del torneo.
