Además del alcalde Jorge Zermeño y de funcionarios públicos, el Teatro Isauro Martínez estuvo abarrotado de estudiantes de primarias y secundarias públicas de Torreón. (FERNANDO COMPEÁN)
Yohan cursa el tercer año en la secundaria Braulio Contreras Amaro de la colonia Compresora, ubicada al poniente de Torreón y uno de los sectores que hace más de ocho años fue de los más golpeados por la ola de violencia que azotó en La Laguna.
A su corta edad, tiene recuerdos muy vagos de aquella época aunque en su mente guarda historias que le han contado en su escuela que en noviembre de 2010 atravesó por momentos de pánico puesto que alumnos, maestros y padres de familia se convirtieron en testigos involuntarios de un tiroteo entre dos grupos de sujetos armados.
El joven, de trato afable, acudió ayer al Teatro Isauro Martínez para presenciar la conferencia "Una historia para no repetir", que presentó Juan Pablo Escobar Henao, hoy conocido como Sebastián Marroquín y quien es hijo del famoso narcotraficante colombiano, Pablo Escobar.
El estudiante dijo que aunque sus padres le han inculcado valores en casa, es importante que las autoridades impartan más pláticas de prevención para evitar el uso de drogas en niños, niñas y jóvenes.
Durante la charla, y sin dudarlo, Yohan levantó la mano para hacerle una pregunta al hijo del máximo líder del Cártel de Medellín.
-¿Pablo Escobar nunca hizo negocios con Joaquín (Loera Guzmán 'El Chapo')?, preguntó Yohan. -En las series sí, en la vida real no, contestó Marroquín.
Como Yohan, otros estudiantes de primarias y secundarias públicas de Torreón también le lanzaron preguntas al hijo del capo.
Algunos le pidieron consejos para evitar caer en el narcotráfico y lo cuestionaron sobre los amores de su padre y el día de su muerte.
Ante un auditorio abarrotado, Sebastián compartió las lecciones de vida que le dejó la convivencia con su padre, que desde los 23 años decretó convertirse en un hombre muy ambicioso, que amagó a sus amigos con suicidarse si a los 30 años no tenía un millón de dólares y que a partir de esa toma de decisión, avasalló los derechos de centenares de personas para lograr su cometido.
En este contexto y después de toda la carrera delictiva de su padre, Juan Pablo Escobar Henao le dijo a los asistentes que "la violencia no es excusa para nadie" aún y cuando la cultura mafiosa siga vigente.
"En el mundo del narcotráfico no hay futuro para nadie, todas las personas que conocí involucradas en este negocio están muertas, el 98 por ciento de las personas que trabajaron con mi padre están muertas o desaparecidas".
Le contó al público que su padre siempre le aconsejó que no debía seguir sus pasos y que le trataba de dar los mejores consejos del mundo aunque él no los pusiera en práctica.
"La gran paradoja de esta historia es que mi papá me inculcó valores humanos que él por fuera de casa nunca ponía en práctica".
Después de una charla de poco más de una hora, Marroquín llamó a los estudiantes a perseverar en los estudios y les dijo que:
"Lamentablemente a ustedes les han presentado a Pablo Escobar como un caso de éxito, yo tengo mis dudas, yo sé que algunos se hubieran deslumbrado con la supuesta fortuna que tenía mi padre pero la realidad es que esa fortuna no le permitió a él tener ni un minuto de felicidad ni le pudo servir para comprar un minuto de tranquilidad".
