Comenta que escogió México como su segunda patria debido a que en Honduras ya no tiene a que regresar, pues la delincuencia le arrebató a su familia, su padre y hermanos fueron asesinados y su madre murió hace varios años por una enfermedad. (EL SIGLO DE TORREÓN)
Para Melvin Rene, un joven hondureño de 23 años su “sueño americano” es llegar a Estados Unidos para trabajar sólo algunos 2 o 3 años y juntar el dinero necesario, comprar una casa y establecerse en México, pues dice que en su paso por este país, llegó hasta Monterrey en donde trabajó en la construcción y le gustó esa ciudad para vivir.
Comenta que escogió México como su segunda patria debido a que en Honduras ya no tiene a que regresar, pues la delincuencia le arrebató a su familia, su padre y hermanos fueron asesinados y su madre murió hace varios años por una enfermedad.
Sólo le queda una hermana que tras lo ocurrido con su familia, decidió huir hacía Estados Unidos, con sus cinco hijos y al llegar a la frontera se entregó a migración para solicitar asilo y se encuentra a la espera de que se revise su caso y le otorguen un permiso para quedarse.
Melvin comenta que con esta son tres veces que intenta llegar hacía la frontera, después de un largo y riesgoso camino hace casi dos meses llegó a Tijuana, sin embargo el Instituto Nacional de Migración lo interceptó y repatrió a Honduras, pero en cuanto “pisó tierra” se regresó para volverlo intentar y trató de entrar por el lado de Coahuila, pero no pudo, por lo que fue a dar a Monterrey en donde encontró trabajo en la construcción.
Ahí permaneció 15 días y luego se regresó hacía La Laguna para ahora intentar llegar a Estados Unidos, pero está vez por Chihuahua.
