Ahora Donald Trump tendrá que usar, por primera vez en su mandato, el poder de veto. (EFE)
El Senado de Estados Unidos aprobó, con el apoyo de 12 republicanos, la propuesta de tumbar la declaración de emergencia nacional que Donald Trump emitió hace un mes para acelerar la construcción del prometido muro en la frontera con México y con ello asestó un duro golpe a la Casa Blanca.
A pesar de que la Cámara Alta tiene el control conservador, 12 republicanos desertaron y se sumaron al rechazo de los 47 senadores demócratas a la declaración de emergencia, una cifra nada despreciable en un partido hasta ahora monolítico en su apoyo al presidente.
El intento de Trump de poner en jaque el balance de poderes y usurpar el control de los fondos federales del Congreso, así como el miedo a sentar precedente de gobierno mediante declaraciones nacionales de todo tipo, fueron demasiado.
Los republicanos que se rebelaron fueron: Susan Collins, Lisa Murkowski, Thom Tillin y Rand Paul, quienes ya habían anticipado su decisión, y a los que se sumaron Mike Lee, Mitt Romney, Lamar Alexander, Marco Rubio, Jerry Morgan, Rob Portman, Roger Wicker y Roy Blunt.
El resultado: Trump tendrá que usar, por primera vez en su mandato, el poder de veto. Para el mandatario es mucho más importante mantener su promesa electoral de frontera segura por medio de una valla en la frontera que el mandato del Congreso: prefiere obviar la negativa explícita del Capitolio al muro y la incapacidad que tiene el Poder Ejecutivo para controlar las finanzas.
Las negociaciones de última hora no surtieron efecto y la cifra de republicanos que rechazaron la idea de Trump y abrieron una grieta en la relación entre legisladores conservadores y la Casa Blanca se amplió de cuatro a los 12.
Donald Trump ya tiene afilado el bolígrafo. "¡Veto!", tuiteó minutos después de la votación. Tiene suerte el presidente que en el Senado, a pesar de las deserciones de este jueves, no hay la mayoría de dos tercios suficientes para revocar su veto y obligarlo a olvidarse de su intención de amasar casi 6 mil de millones de dólares para la barrera fronteriza de fondos provenientes de varias agencias federales.
"Estoy deseando VETAR la resolución recientemente aprobada e inspirada por los demócratas que abriría las fronteras y con ello incrementaría el crimen, las drogas y el tráfico en nuestro país", escribió en la red social más tarde, insistiendo en la necesidad "desesperada" de construir el muro.