Al igual que su marca de whisky, McGregor volvió a dejar un mal sabor de boca. Esta vez fue arrestado por la policía de Miami tras haber arremetido contra uno de sus fans, quien fue atacado por el peleador al intentar tomarle una fotografía.
Conor fue acusado de daño criminal y robo a mano armada, después de quitar el teléfono con el que era fotografiado y tirarlo al piso. Sin embargo, su estancia fue efímera, tal y como lo fue la suspensión que la indulgente comisión atlética de Nevada concedió al irlandés tras los hechos sucedidos en la cartelera del UFC 226, donde enfrentó al peleador ruso Khabib Nurmagomedov, quien recibió la sanción más alta.
Tal y como era de esperarse, McGregor fue liberado tras pagar una fianza, un hecho muy parecido al auspicio de su marca de Whisky en la cartelera que el mismo encabezaba en el UFC 226, y que ayudó a soslayar por completo los ataques contra su rival, (Khabib Nurmagomedov). Esta parábola es el claro ejemplo de que el whisky de McGregor, al que decidió llamar "Proper Whisky" (El Whisky apropiado) es la versión metonímica de su comportamiento: Amargo, pero embriagante. Y pese a que su conducta no es tan "apropiada" como su licor, a todos les parece bien tomarlo, e incluso brindar por él. ¡Salud!
