Las calificadoras hacen su labor técnica y evalúan las condiciones de los gobiernos para emitir deuda. (ARCHIVO)
Fernando Royo Díaz de Rivera, presidente de IMEF Laguna, rechazó la postura tomada por algunos legisladores y gobierno federal de querer diseñar leyes que prohíban a las calificadoras dar sus opiniones sobre temas de deuda.
Dijo que la decisión externada es muy ligera, por lo que aconsejo que el tema debe de tomarse muy en serio, pues opinó que independientemente de que tengan presencia física en el país, ellas califican a todos los emisores de deuda.
Sobre la petición hecha por el gobierno de que califiquen también la corrupción de los países, Royo Díaz de Rivera mencionó que ellos no califican la corrupción, dado que estudian las probabilidades de pago de los emisores, y que en base a ello asignan una calificación que es muy tomada muy en cuenta por las instituciones financieras que prestan el dinero.
"Esa calificación de riesgo es la que define las tasas a prestar o incluso el extremo de no prestar".
Por su parte, Carlos Thome comentó que las calificadoras internacionales son entidades autónomas, apolíticas y globales que continuarán midiendo el riesgo país para los mercados globales en independencia de la postura que un país, gobierno o persona pueda opinar o creer respecto a esta calificación dada.
Explicó que las calificadoras son entidades que se basan a aspecto estrictamente técnicos y de buenas prácticas de administración, en donde el desempeño de dichos indicadores arroja una calificación que se estandarizan para todos los países.
Afirmó el especialista financiero que es muy importante que los países lleven la implementación de un presupuesto fiscal responsable, y que lo cumplan de lo contrario aspectos tan simples como el costo del crédito subiría y el riesgo país para inversiones nuevas disminuiría, afectando directamente al crecimiento de México y el bienestar de social.
