Después de la decepción (bueno al menos yo) del pasado domingo en Atlanta y que sin duda quedó a deber el campeonato de la NFL y como siempre mientras se encontraba el calendario regular del deporte de las tackleadas, estuvimos con "un ojo al gato y otro al garabato", ahora nos metemos al fantástico mundo del mejor basquetbol que uno se pueda imaginar y que sin duda, desde el pasado mes de octubre en que comenzó el espectáculo del "deporte ráfaga", la noticia que más llamó la atención independientemente de la dinastía que ya ha formado la escuadra de Golden State, era la llegada de LeBron James a la organización de los Lakers porque sin duda, uno de los equipos de más tradición en la historia de la NBA, estaba quedando mucho a deber en los últimos años por lo que la llegada del exjugador de Cleveland, la garantizaba al equipo de Los Ángeles, darle pelea a los actuales campeones en el pacífico de la conferencia oeste.
A pesar de las lesiones del llamado "Rey", la escuadra de Luke Walton, intenta dar pelea aunque este tipo de improvisos, los ha alejado del conjunto de la bahía quienes se ha posesionado, como ya es una costumbre, de toda la conferencia peleando palmo a palmo con unos sorprendentes Nuggets de Denver dejando un poco atrás al Trueno de Oklahoma.
Mientras que, en la conferencia del este, era de esperarse que los Caballeros de Cleveland al momento de que se desprendieron de quién se cargaba al equipo a los hombros, casi están diciendo adiós a la temporada porque, el pasado martes, solo se encontraban con 11 victorias en la campaña con 42 descalabros y de no ser por la escuadra de los Knicks, se encontrarían volando solos en el limbo esperando a ver quién les podía echar la mano.
En este lado, el conjunto de Milwaukee de la mano del griego Giannis Antetokounmpo (sigo pensando que como le hacía la maestra cuando pasaba lista en la escuela), lleva a los Bucks en lo más alto peleando con los Raptors porque, como ya nos lo imaginábamos, la llegada de alero Kawhi Leonard procedente de San Antonio, le dio mucha fortaleza a la escuadra canadiense y aunque la lucha de estas dos escuadras es por la cima de todo el este para que, cuando llegue la hora de la verdad, quedarse con la prioridad de iniciar los juegos en casa, en sus respectivas divisiones, tanto como Boston así como Indiana, ven como se les están escapando.
Y cuando casi llegamos a la mitad del camino, si hay un jugador que a muchos nos cae como un cuate, ese es Anthony Davis de Nueva Orleáns porque cada vez pensamos que cuando juega, son el egresado de la universidad de Kentucky y quince Pelícanos más porque en estos momentos, parece que sus días con el conjunto de Alvin Gentry, ya están contados debido a que precisamente Los Lakers, se quieren hacer de sus servicios pero la escuadra de Luisiana, quiere que las negociaciones, sean más atrayentes.
Veremos en qué queda todo esto.
