Ingratitud al esqueleto
Más doloroso para Jesucristo que los clavos y los azotes debió haber sido. Los escupitajos y los desprecios de las mismas personas a las que había sanado y aliviado sus penas y dolores.
Comentario alusivo a la tragedia ocurrida en el estado de hidalgo. Sitio donde hay muchas personas que dentro de sus “buscas” está la de ordeñar ductos de Pemex es usual en estos poblados y es hasta “normal” secuestrar, desarmar y agredir física y verbalmente a los militares.
En las imágenes de la tragedia se aprecia que el sitio es un sembradío y el perímetro de riesgo es al menos trescientos metros a la redonda de la perforación al ducto ciertamente los veinticinco militares que llegaron al sitio aunque se colocaran en el perímetro les tocaría de a cuarenta metros a cada uno, y además ya había personas en una verdadera verbena que con singular alegría recolectaban el combustible pero usando la palabra correcta robaban si señor robaban el combustible y con una multitud de personas incluyendo mujeres y niños que sin ningún recato y entre risas ignoraban los gritos de los militares y corrían al sitio que se aprecia con claridad que el chorro bañaba a los que se acercaban y esto duro al menos seis horas.
Hasta el oscurecer y ya no se aprecia, pero debieron de haber cerca de doscientas personas hipnotizadas con obtener gratuitamente un beneficio económico.
Y luego al momento del “infiernazo” ¿donde están los soldaditos que nos ayuden? Ahora no había burlas ahora no había amenazas, menos aun pedradas a los militares.
Que como siempre prestos a ayudar ayudaron en todo lo que pudieron.
Esta muy dolorosa tragedia debe servir en primer lugar para que no vuelva a ocurrir algo similar pero también para que como nación hagamos una pausa y recapacitemos. Sí el crimen del narco maneja tantos recursos y poder, si las estructuras de autoridades están tan permeadas por la corrupción y hasta la empresa Pemex y los políticos nadando en sus propios intereses entonces que es lo que sostienen que a la nación no “ se la cargue el payaso” ciertamente y todos en el fondo de nuestro corazón lo sabemos que el esqueleto de la patria o sea su estructura soporte son nuestras fuerzas armadas y lo digo con el corazón en la mano “nuestras” por que proceden estos muchachos y muchachas totalmente del pueblo y demuestran a diario su entrega y además echan por tierra la tesis del ex presidente de que la corrupción está en nuestro adn y esta institución lo demuestra no se niega tampoco que como en todo arroz puede haber sus “prietitos”.
Pero es importante reconocer a estas instituciones como garantes de nuestras libertades y darles el valor y respeto. Que ciertamente se ganan a diario.
Por cierto comentario al margen las mujeres militares están demostrando y no sólo en México también en el mundo lo que debe hacer la mujer arrancar sus ascensos por mérito propio y no esperar a que la sociedad les regale nada.
Y una felicitación al sr. presidente don Andrés (comandante supremo de las fuerzas armadas) por su decidido combate a la rapiña en todos los frentes.
Y que dios como siempre nos bendiga a todos.
Atte.
Ing. Arturo Pedro Salas Juárez
Comarca Lagunera.