El ministro del Interior, Matteo Salvini, protestó contra el buque español Open Arms.
Los puertos italianos permanecerán cerrados para los traficantes de personas y quienes los ayudan, aseguró ayer el ministro del Interior, Matteo Salvini, al justificar la negativa a que el buque español Open Arms atracara en el país con más de 300 migrantes rescatados frente a Libia.
"La nave Open Arms, de una ONG española con bandera española, ha recogido a (más de) 300 inmigrantes y ha pedido un puerto italiano para desembarcarlos, después que Malta (tras haber desembarcado a una mujer y un niño) dijo que no", escribió.