Problema. La consultora británica Cambridge Analytica utilizó una aplicación para recopilar millones de datos de usuarios. (EFE)
La Fiscalía general del Distrito de Columbia, en Washington, demandó hoy a la red social Facebook por el escándalo de Cambridge Analytica, la consultora que ofrecía datos de esta plataforma para influir en procesos electorales, según el diario The Washington Post.
La demanda presentada por el fiscal general de Washington, Karl Racine, supone la primera causa en la que una autoridad estadounidense toma acciones judiciales contra Facebook en represalia por este caso, aunque la empresa ya fue multada en el Reino Unido con 500,000 libras, de acuerdo a este medio.
El pasado marzo se reveló que la consultora británica Cambridge Analytica (que cerró en mayo a raíz de esta crisis) utilizó una aplicación para recopilar millones de datos de usuarios de Facebook, que se pudieron utilizar para influir en la campaña electoral de 2016 del presidente de EU, Donald Trump.
El periódico, que cita una fuente conocedora de la demanda, es probable que la querella sea modificada para incluir nuevas alegaciones recientes en relación a las políticas de privacidad de Facebook. Además, distintos estados de EU están investigando a la compañía en el mismo sentido.
El escándalo de Cambridge Analytica y los comicios en Brasil y EU redoblaron este 2018 la presión sobre Google, Facebook, Twitter y otras tecnológicas para que protejan la privacidad de sus usuarios y para que limiten el tipo de contenidos que se pueden publicar online.
La gran "bomba" detonó en marzo, cuando se reveló que la consultora británica Cambridge Analytica (que cerró dos meses después a raíz de esta crisis) utilizó una aplicación para recopilar millones de datos de usuarios de Facebook sin su consentimiento con fines políticos.
El escándalo fue mayúsculo: las acciones de Facebook se desplomaron en la bolsa, el consejero delegado de la empresa, Mark Zuckerberg, tuvo que pedir disculpas públicamente y comparecer en el Congreso de EU, y representantes políticos en varias partes del mundo alertaron sobre la necesidad inmediata de regulación.