A ño con año la Asociación del Futbol de Inglaterra (FA) organiza junto a la organización Stonewall la campaña “Rainbow Laces” (cordones arcoíris) como muestra de apoyo a la comunidad LGBT.
Pese a haber sido una jornada llena de derbis para la Premier League, lo más importante no fue el futbol, sino de quién es. La liga lo entiende perfectamente: apoyar a la comunidad LGBT, teniendo como escenario el deporte más popular, fue una oportunidad imperdible para ellos.
El balompié de Inglaterra se vistió de colores. El arcoíris estaba en todos lados: en las agujetas del calzado del futbolista, en el brazalete de capitán, en el mismo logo de la Premier League e incluso en los pines de los sacos de directivos y entrenadores. Buscaban promover un mensaje de igualdad: “Este es el juego de todos”. Pero no cayó tan bien entre sus seguidores. El inglés es especial, territorial. Son los creadores del futbol y no les gusta que les digan qué hacer, mucho menos que vengan a modificar la línea de su deporte, aunque fuera por un par de jornadas. En las publicaciones de redes sociales de todos los equipos y de la misma liga, había reacciones negativas y mensajes de odio. Situaciones que no sólo estaban en la pantalla, sino en los estadios y alrededores.
SEGUNDO TIEMPO
La liga previó esa situación, ya que esta no es la primera vez que ocurre ese evento. Lanzó herramientas para que los usuarios denunciaran comportamientos incorrectos respecto a esta campaña de manera online.
Kick it out (Patéalo) es una organización que lleva 25 años trabajando campañas para la igualdad en el futbol. Esa vez, la Premier League se asoció para que desde su aplicación o por su foro en internet, los usuarios hicieran reportes.
Durante la campaña 20172018 se han registrado 201 reportes de malos comportamientos en redes sociales, y más de la mitad de todos los reportes son por racismo.
En la medida que se continúe apoyando estas campañas, la homofobia y el racismo disminuirán no solo de cancha, sino de la sociedad.
TIEMPO EXTRA
Un diseñador de modas reveló que fue amante de un futbolista de la Premier League, del cual no quiso revelar su nombre puesto que estaba seguro que de hacerlo, arruinaría su carrera en el balompié.
Aseguró que el ambiente dentro y fuera del club es bastante complicado para quienes son homosexuales o bisexuales.
