En medio del desconcierto que les causó el cierre inesperado del Panteón Jardines del Carmen por disposiciones de Protección Civil y supuestamente por humedad generalizada, vendedores de flores que tradicionalmente se instalan en la calle de acceso, se mostraron indignados porque se quedaron con su mercancía comprada.
Realizaron una inversión importante en flores, alimentos, frutas, aguas frescas, cañas que comercializarían este jueves como año con año lo hacen afuera del panteón privado, pero grande fue su sorpresa cuando llegaron y se encontraron con el lugar cerrado.
Los manojos de los tradicionales Cempoales, Mano de León, La Nube, se marchitaron conforme pasaron las horas de este jueves 1 de noviembre cuando se visita las tumbas de los Niños Difuntos.
Doña Vicky Alvarez, quien se dice representante de los vendedores del lugar, se dice sorprendida porque "en 60 años que tengo viniendo aquí, es la primera vez que cierran totalmente el panteón. Y se nos hace raro porque ayer miércoles hubo tres servicios y nadie dijo anda".
Asegura que la mayoría, tienen años ocupando esos lugares y por los que pagan por lo menos 400 pesos, dependiendo de lo que vendan. "Yo estoy aquí desde el lunes alistándome con calma bien para vender mis flores y hasta anoche como a las 11 nos dijeron de Protección Civil que el panteón estaría cerrado".
Los vendedores no han pagado nada este año, aunque los inspectores de Plazas y Mercados a bordo de camionetas nuevas hacen recorridos por los cementerios. "A nosotros no nos han cobrado y pues cómo sino hemos vendido nada y en algunos casos debemos parte de la mercancía".
Y aunque en el exterior del cementerio privado se exhibe una lona donde se informa que en el lugar sólo se permitirá el acceso a las personas que vayan en procesos funerarios, ellos dicen que están dispuestos a impedir que entren las procesiones mortuorias.
Se mostraron indignados porque se quedaron con su mercancía comprada. (FERNANDO COMPEÁN)
