La policía investiga la violación y asesinato de Marinova, de 30 años, cuyo cuerpo estrangulado fue hallado el sábado. (ARCHIVO)
Un sospechoso ha sido arrestado en relación con el homicidio de la reportera televisiva búlgara Viktoria Marinova, cuyo cuerpo fue hallado después de revelar una posible corrupción gubernamental, reportó este martes la radio nacional de Bulgaria.
Según información no confirmada del Ministerio del Interior, el sospechoso es “un ciudadano rumano con pasaporte de Moldavia”, indicaba el reporte. De inmediato no había más información.
La policía investiga la violación y asesinato de Marinova, de 30 años, cuyo cuerpo estrangulado fue hallado el sábado cerca del río Danubio. Marinova presentó el mes pasado un programa con dos periodistas investigativos quienes fueron detenidos por su trabajo sobre un supuesto fraude que involucraba fondos de la Unión Europea.
El ministro del Interior dijo el lunes que los fiscales están investigando al Grupo GP, una gran compañía de construcción privada búlgara que supuestamente malversó los fondos de la UE, y congeló 14 millones de euros (16 millones de dólares) de sus bienes.
Aunque aparentemente Marinova no trabajó de cerca en la investigación, su programa tocó un tema sensible en Bulgaria, donde la corrupción es frecuente. La nación balcánica ingresó a la UE en 2007 y el año pasado quedó en el puesto 71 de la lista de corrupción de Transparencia Internacional. Al unirse al bloque se abrió la posibilidad de financiamiento de la UE para proyectos de infraestructura búlgaros u otros programas diseñados para que la nación alcance los estándares de la UE.
Organizaciones de periodistas y líderes europeos expresaron su consternación por el asesinato de Marinova. Margaritis Schinas, vocero del presidente de la Comisión Europea Jean-Claude Juncker, dijo el lunes que la comisión espera “una rápida y exhaustiva investigación... que lleve a la justicia a los responsables y aclare si este trabajo está relacionado con su trabajo”.
El ministro del Interior Mladen Marinov insistió el lunes en que no había pruebas de que el asesinato estuviera vinculado con el trabajo de Marinova.
"Sólo se trata de violación y homicidio", dijo.
