El pacto contempla, además, una cláusula de fecha de entrega y cantidad indefinidas que permitirá al Ejército estadounidense adquirir a lo largo del tiempo un total de 475 aparatos y 120 simuladores. (ARCHIVO)
El Departamento de Defensa de Estados Unidos anunció hoy haber alcanzado un acuerdo con el fabricante aeronáutico Boeing para la adquisición de 351 aviones de entrenamiento T-X y 46 simuladores por valor de 9,200 millones de dólares.
El pacto contempla, además, una cláusula de fecha de entrega y cantidad indefinidas que permitirá al Ejército estadounidense adquirir a lo largo del tiempo un total de 475 aparatos y 120 simuladores.
"Esta nueva aeronave nos proporcionará la capacidad de entrenamiento avanzado que necesitamos para aumentar la letalidad y efectividad de nuestros futuros pilotos", señaló la secretaria de las Fuerzas Aéreas de EU, Heather Wilson, en un comunicado.
Los primeros T-X y simuladores serán entregados en 2023 y, en última instancia, todos los cadetes de las Fuerzas Aéreas acabarán empleando estos sistemas durante su periodo de formación.
Esta adquisición servirá para reemplazar la flota de T-38C Talons, que vienen empleando las Fuerzas Aéreas para la formación de sus pilotos desde hace 57 años, explicó el Pentágono en la nota.
El Departamento de Defensa planeaba reemplazar sus viejos cazas de entrenamiento T-38 desde 2003, pero pospuso en varias ocasiones la licitación del programa por cuestiones presupuestarias.
El acuerdo alcanzado con Boeing es 10,500 millones de dólares más barato que la oferta inicial presentada por la empresa aeronáutica.
"Gracias a la competición ahorraremos al menos 10,000 millones en el programa T-X", celebró Wilson.
El T-X cuenta con un motor, dos colas gemelas, el asiento del copiloto ligeramente más elevado que el del piloto para que el instructor tenga mayor visibilidad, y un cuadro de instrumentos avanzado con sistema de entrenamiento incorporado.
