Si crees que tu mascota sufre de esta infección, se recomienda acudir al veterinario. (ARCHIVO)
La sarna es una enfermedad que afecta a muchos animales, siendo los perros uno de los grandes afectados por esta infección.
Este problema es producido por diminutos parásitos denominado ácaros, que pertenece a la familia de los arácnidos.
Lo ideal es detectar cuanto antes si tu “perrhijo” tiene esta enfermedad, así podrá ser más fácil combatirla, esto lo logras observando si tiene los siguientes puntos:
-Se da constantes mordidas en la piel
-Pierde más pelo de lo común
-Le aparecen costras
-Pierde peso
-Piel enrojecida
-Tiene llagas en la piel
-Costras en la piel
-Tiene pérdida de apetito
-Se observan calvas su cuerpo
-Produce mal olor
Si crees que tu mascota sufre de esta infección, se recomienda acudir al veterinario que, con una muestra pequeña de piel y con ayuda de un microscopio, podrá darte un diagnóstico más concreto.
Aunque no es posible prevenir este mal por completo, hay algunos consejos que hará más difícil su aparición o contagio:
-La higiene: Mantener a tu mascota limpia debe ser una prioridad. Se deben bañar al menos dos veces al mes y si se ensucia jugando en el parque se debe asear de vuelta. Además limpiar sus enseres, como su plato de comida, su cama, sus juguetes, entre otros.
-Buena alimentación: Si el perro está fuerte y sano, será difícil que contraiga sarna.
-Evitar el contagio de un animal que la padezca: Si hay otro perro con síntomas o sabes que padece de esta infección, es importante evitar el contacto.
¿PUEDEN CONTAGIARNOS?
Sólo hay un tipo de sarna llamada sarcóptica, la cual es altamente contagiosa y corremos el riesgo de contraerla.
Además, hay que tener en cuenta que los síntomas de contagio no aparecerán hasta al menos una semana después, por lo es indispensable acudir con el veterinario al menor síntoma.