La clave de tu recuperación

La ciencia ha detectado que las causas de muerte más frecuentes como la hipertensión, enfermedades cardiovasculares o accidentes cerebrovasculares son en su mayoría consecuencia de una mala alimentación y principalmente de una ingesta baja de potasio. Por lo tanto es muy importante la presencia de este mineral en el organismo para conservar un estado saludable.

El potasio es un macro mineral con importantes funciones a nivel del músculo y del sistema nervioso. Es el tercer mineral más abundante en nuestro cuerpo. Este se encuentra casi en 98 por ciento de nuestras células y se encarga de regular el balance de agua, la relajación de los músculos y reducir los excesos de otros minerales como el sodio. Su nivel normal es de 3,5 a 5,0 mmol/L.

Consumir alimentos ricos en potasio ayuda a detener la caída de cabello, a tener niveles de energía estables en el organismo y a mejorar el trabajo de los riñones. Por el contrario, la ausencia del potasio puede afectar el funcionamiento del miocardio y la activación de los sistemas enzimáticos. Hay una gran influencia también en la construcción de proteínas y la incrementación de la excitabilidad neuromuscular.

¿Dónde se encuentra?

Es muy común relacionar a este componente con el plátano, y sí, es una fruta muy rica en potasio y magnesio, pero hay otros referentes que también nos pueden dar buenas cantidades de este mineral. Se encuentra en gran variedad de alimentos no refinados como en los frijoles, en frutos secos, en hortalizas (como la espinaca, el repollo y el perejil) y en frutas (como la papaya y el dátil).

Se debe tener demasiado cuidado con el procesamiento de los alimentos mencionados, ya que reduce la cantidad de potasio. Se recomienda una dieta baja en alimentos procesados.

¡No lo descartes!

El cuerpo regula los niveles de potasio en la sangre orientándolo hacia adentro o hacia afuera de las células. Cuando hay una destrucción de las mismas, el potasio sale de la célula hacia el torrente sanguíneo, y la excreción, si es mayor a la ingesta, causa hipokalemia. Este padecimiento es un desequilibrio electrolítico, con un nivel bajo de potasio en la sangre. El exceso de insulina -especialmente si es diabético- puede causar un movimiento de potasio hacia las células y los niveles de sangre bajan. Esto quiere decir que el paciente requiere de tratamiento inmediato.

Un diagnóstico oportuno se puede obtener a través de exámenes médicos de sangre o un electrocardiograma. Por lo regular las personas más propensas a tener hipokalemia son aquellas que sufren trastornos alimenticios, SIDA, alcoholismo, o que han pasado por cirugías bariátricas.

Si tienes alguna sospecha, a continuación te presentamos los síntomas que puedes llegar a experimentar y a los que debes prestar atención para acudir al médico:

1. Cansancio

2. Calambres en los músculos

3. Vómitos

4. Mareo

5. Palpitaciones irregulares del corazón

6. Estreñimiento

7. Sed

8. Desmayo

9. Depresión

10. Alucinaciones

¿Cuál es la solución?

Principalmente hay que evitar la cafeína y el alcohol excesivo. Cuando ya hay un padecimiento grave, el tratamiento dependerá del médico y de los niveles que presente el paciente, pero si no es así bastará con una dieta de alimentos ricos en potasio.

Si eres un deportista de alto rendimiento es necesario mantener una dieta con porciones altas en este mineral, ya que es un tipo de electrolito. Te ayudará a la función de los nervios, a la contracción de los músculos y a que tu ritmo cardíaco se mantenga constante en la actividad deportiva. También permitirá que los nutrientes fluyan a tus células y a expulsar los desechos de estas. Como consecuencia tendrás mayor recuperación después del ejercicio y menor tendencia a experimentar algún calambre o lesión.