(ESPECIAL)
Cuando alguien decide descontar un pagaré tiene dos alternativas: la primera opción es escoger el banco y la segunda optar por otras entidades de financiación. En ambos casos existen ventajas e inconvenientes, pero hay una característica importante que prioriza en el momento de tomar una decisión que es la rapidez.
Frente a esa condición son más notables y resultan una mejor opción las entidades de financiación por encima de los bancos, ya que estos últimos suelen poner muchas condiciones, comprobaciones y garantías de que no haya impagos por parte de los clientes.
¿Por qué los pagarés son una buena opción?
Para aquellos que aún no lo tienen muy claro, es importante mencionar que el descuento de pagarés es una excelente alternativa para aquellas empresas, instituciones o personas que requieran obtener liquidez de forma inmediata sin esperar a la fecha de vencimiento del pagaré.
¿Y cómo se genera un pagaré? Éste compromiso surge de una relación comercial entre determinada empresa y un cliente, cuyo trabajos o servicios conllevan a la emisión de una factura. Sin embargo, en vez de pagar directamente la suma generada por ese trabajo, el cliente ofrece un pagaré con el cual se compromete a pagar en una fecha determinada.
Las entidades de financiación ponen mucho de su parte durante el proceso a la hora de descontar pagarés ya que por norma general no suelen tantas comprobaciones, no piden avales y normalmente ofrecen un servicio de atención más personalizada que en las entidades bancarias.
Se puede decir que las entidades de financiación como Gedesco, son más rápidas y ayudan más al cliente en todo el proceso que conlleva el descuento de un pagaré. Estas entidades son mucho más transparentes y sólo aplican una tasa de descuento, mientras que los bancos pueden aplicar hasta cuatro tipos de comisiones diferentes y muchas veces de forma oculta sin que el cliente llegue a enterarse.
Sobre los tipos de pagarés
Existen varios tipos de pagarés pero para que puedan ser descontados sólo se puede hacer con dos tipos que serán determinados por el endoso, estos son:
• Pagaré a la orden. Este pagaré quiere decir que se puede transmitir a un tercera persona, y que se podrá descontar en cualquier entidad financiera.
• Pagaré no a la orden. Cuando se paga con un pagaré de éste tipo, se indica que el titular no está en la condición de endosar el pagaré a un tercero, sólo él puede cobrar ese pagaré entendido que el importe se pagará a un tercero llegada la fecha de vencimiento del pagaré.
Otras ventajas de descontar pagarés
El descuento de pagarés a través de entidades de financiación como Gedesco también tiene otras ventajas que resultan excelentes para considerarlas:
• Flexibilidad: Para el beneficiario el descuento de pagarés le permite descontar sólo aquellos documentos que sean estrictamente necesarios.
• Fuera impagos: El riesgo a los impagos por parte de los clientes es una de las responsabilidades que asumen las entidades de financiación en caso de que el emisor no abone el importe una vez cumplido el plazo o la fecha de vencimiento.
• Mejora los ratios de balance: Gracias a este descuento disminuyen los plazos para cobrar, de la misma forma que se reduce el saldo de los clientes.
• Rapidez: A través de las entidades de financiación tantos los clientes como las empresas consiguen financiación inmediata, logrando solucionar de forma expedita los problemas de liquidez.
• El coste: A la hora de descontar un pagaré es importante que se tenga en cuenta que si se adelanta el cobro con la fecha de vencimiento. Es decir, si el portador del pagaré adelanta el cobro no cobrará la totalidad del importe que corresponde por el pagaré.
En la realización de un pagaré intermedian dos sujetos: el emisor, que es quién se compromete a pagar un determinado importe y el beneficiario, que es la persona o sociedad a cuya orden hay que pagar la cantidad acordada en el pagaré.
Para que un pagaré sea emitido de manera correcta y esté amparado legalmente amparado, y además pueda ser efectivo para su descuento debe contener nueve especificaciones:
1. Lugar y Fecha en el que el pagaré ha sido emitido.
2. Nombre de la entidad bancaria y de la oficina librada
3. Identificación completa del ente beneficiario (persona física o jurídica)
4. Importe expresado tanto en cifras como en letras
5. Fecha de vencimiento del pagaré
6. Número de cuenta bancaria y Código IBAN del emisor
7. La palabra PAGARÉ visible
8. Identificador de la barra de truncabilidad, para que el pagaré pueda ser informatizado.
9. La firma y el sello del emisor.
