MISIÓN: IMPOSIBLE - REPERCUSIÓN; APÓSTOLES Y MANIFIESTOS
El agente de la Fuerza Misión Imposible, Ethan Hunt (Tom Cruise) es asignado para impedir los planes de un grupo terrorista llamado Los Apóstoles, seguidores de las ideas del peligroso líder fundamentalista Solomon Lane (Sean Harris), a quien Hunt capturó hace dos años. Los criminales planean adquirir tres núcleos de plutonio para fabricar sendas bombas nucleares. Ethan Hunt y sus compañeros Benji (Simon Pegg) y Luther (Ving Rhames) no logran impedir la adquisición del plutonio, así que la directora de la CIA, Erica Sloane (Angela Bassett) asigna al agente August Walker (Henry Cavill) para supervisar al equipo de Misión Imposible. El mundo está en peligro.
SE ACERCA UNA TORMENTA
En 1966 inició la teleserie Misión Imposible, dedicada a seguir las peripecias de un grupo de espías en contra de fuerzas desestabilizadoras del orden mundial. La serie terminó en 1973, pero su premisa fue retomada en 1996, para una versión cinematográfica estelarizada por Tom Cruise y un gran elenco. Tras el éxito del primer filme, vinieron nuevas entregas, cada una encomendada a un director distinto, pero todas con Tom Cruise en el papel del agente Ethan Hunt. La quinta cinta de la millonaria franquicia fue Misión Imposible: Nación Secreta (Mission: Imposible - Rogue Nation, 2015), la cual retomó a El Sindicato, su enemigo usual en la teleserie. Estos personajes funcionaron.
NO PUEDE HABER PAZ SIN UN GRAN SUFRIMIENTO
La quinta entrega quedó en manos del norteamericano Christopher McQuarrie, quien también se encargó del libreto final. McQuarrie fue sugerido por Tom Cruise, a quien dirigió en la película Jack Reacher (2012), además de ser el guionista de otras cintas de la estrella, como la exitosa Al Filo Del Mañana (2014). McQuarrie puede ser un autor creativo: recordemos que escribió el filme Sospechosos Comunes (1995), el cual le valió el Oscar de Mejor Libreto Original. Tras el éxito de Misión Imposible: Nación Secreta, Christopher McQuarrie regresó como director y guionista de la sexta entrega: Misión: Imposible - Repercusión (Mission: Imposible - Fallout). ¿Qué tal quedó?
ESTA ES UNA MALA IDEA
Sin revelar mucho, la sexta entrega contiene referencias a otras cintas de la franquicia y reaparecen personajes importantes de la entrega previa. El guión resulta demasiado enredoso, con subtramas que se desaprovechan. La duración se antoja excesiva para la historia que se cuenta, pero Misión: Imposible - Repercusión compensa su falta de originalidad con un manejo espectacular y claro de la acción. La cinematografía virtuosa de Rob Hardy y la dedicación de Tom Cruise a la saga hacen que las peleas, persecuciones y acrobacias eleven el nivel del filme, el cual maneja su trama con mucha seriedad y poco sentido del humor. La secuencia final es emocionante, ridícula y delirante.
CONCLUSIÓN
Misión: Imposible - Repercusión es recomendable solo para fanes. Es requisito indispensable haber visto Misión Imposible: Nación Secreta para comprender mejor los hilos con que se teje la trama.
