Alex Ibarra, jugador del América. (Jam Media)
América despachó a un Veracruz sin técnico y que no se cansa de dar tumbos por la vida. Gran noche amarilla en el Puerto que reivindicó a los atacantes Henry Martín y Cecilio Domínguez, autores de los goles en el triunfo de las Águilas (0-3) en la Copa MX.
Golpe de autoridad que los aventaja en la clasificación, para ser líderes del Grupo 7. Las Águilas quieren volar con tranquilidad a los octavos de final, y por ahora lo hacen con siete puntos; sin embargo, deberán esperar a su duelo de vuelta contra los Dorados.
Mientras que los Tiburones Rojos prácticamente se despidieron del certamen, así como lo hicieron del estratega que los salvó del descenso, Guillermo Vázquez. Para exhibirse ante el América, la plantilla del Veracruz salió a exhibirse con Hugo Chávez, que dejó la sub-17 para ser interino del primer equipo. Y así saltó al ruedo, con la única seguridad de que serían la víctima de un América que viene en ascenso de resultados.
Los escualos se ahogan sin unidades en el certamen copero, prácticamente flotan boca arriba solamente para cumplir con el trámite, aunque tendrán que cumplir todavía al Gran Pez, en la vuelta.
Los de Miguel Herrera se plantaron firmes en el estadio Luis de la Fuente, con una alineación que intimidó por ser los titulares de la Liga, incluso, echó mano de Agustín Marchesín en la portería en lugar de Óscar Jiménez. Era tal el dominio de los capitalinos que sorpresivamente el marcador no se abrió en los primeros minutos. Pero las advertencias estaban obligadas a cumplirse en el primer tiempo.
El primero que clavó el arpón en las redes escualas fue Henry Matín, a los 26', con un remate de cabeza.