Daniela Souza, de México, durante los XXIII Juegos Centroamericanos y del Caribe Barranquilla 2018, en el Colegio Marymount, en Barranquilla, Colombia. (Jam Media)
En los últimos cinco Juegos Olímpicos, México ha conseguido por lo menos una medalla en taekwondo. La racha tiene una gran posibilidad de mantenerse en Tokio 2020, gracias a una nueva generación que inició el ciclo en los Juegos Centroamericanos y del Caribe con una cosecha de cuatro preseas de oro en el segundo día de actividades, que se suman al par que la delegación se colgó el viernes.
Los taekwondoínes tricolores consiguieron que el himno nacional mexicano fuera la melodía exclusiva en el Coliseo del Colegio Marymount, al premiar las modalidades de combate. Daniela Souza, Paulina Armería, Brandon Plaza y José Rubén Nava son nombres que por los próximos tres años se escucharán en el deporte amateur, ya que son la semilla con la que el país busca las preseas que den continuidad al legado del taekwondo.
La tarde fue encabezada por la medallista de plata panamericana en Toronto 2015, Armería, quien venció en la final de menos de 57 kilogramos a la venezolana Adriana Martínez por 24-7.
"La medalla es muy gratificante, porque es una recompensa que obtuve al estar sorteando obstáculos. Fueron cuatro meses en los que estuve inactiva. Hace seis semanas aún estaba en el quirófano, por lo que fue todo un reto físico y mental", declaró.
En noviembre fue cuando se estipuló, en un nacional, quiénes serían los taekwodoínes que representarían a México en Barranquilla, por lo que Paulina tuvo que redoblar esfuerzos para alcanzar la justa, ya que en un país con alto nivel en este deporte, las oportunidades no llegan con copia.
SU TRIUNFO MÁS GRANDE
Para Daniela Souza, subir al primer puesto del podio, al vencer 13-5 a la guatemalteca Elizabeth Zamora, es el triunfo más grande hasta ahora en su andar.
La tijuanense reconoció que ascender a la categoría de adultos fue un crucigrama que tardó mucho en resolver.
"Esto [la medalla de oro] me da mucha esperanza. Es lo más importante que he conseguido en más de tres años, porque estaba muy presionada por obtener un logro tan grande como éste. Se me dificultó bastante el salto a adultos, porque buscaba el lugar con Itzel Manjarrez y nunca podía. Vengo de una actuación decepcionante en los Panamericanos de la especialidad, por lo que este triunfo me enorgullece", dijo Souza, emocionada.
La bajacaliforniana, con la presea dorada en la mano derecha, sostuvo que de inmediato quiere volver a los entrenamientos para poder repetir triunfos internacionales; la miel de la victoria se volvió adictiva.
Quien estuvo a punto de no ganar el oro fue Brandon Plaza, quien en el primer round consiguió una ventaja de 14 puntos sobre el dominicano Luisito Pie, pero éste fue recortando hasta ponerse a una unidad del empate. El guanajuatense soportó la presión y resolvió en los segundos finales del tercer asalto para conquistar el título en la categoría de menos de 58 kilogramos.
En menos de 68 kilogramos, el campeonato fue de José Rubén Nava, al vencer al guatemalteco Andrés Zelaya por 14-5.
