Después de que Santos Laguna gana un título de liga viene un período de gracia que el aficionado santista le concede a su equipo, es decir, le consiente prácticamente todo, recordar como un ejemplo sumamente ilustrativo, a un año de ganar su primer campeonato, el del Invierno 96, los guerreros terminaron como último lugar en el Invierno 97 con el mismo Alfredo Tena y nadie pidió la cabeza del Capi Furia, él, por dignidad decidió irse. Las ventajas o desventajas de descansar en el enorme colchón que te da conseguir una estrella.
La directiva de Santos sabe lo que costaría retener a sus estrellas y no hay mejor momento para negociarlos después de un título, la afición está de buen humor y tú sabes cómo es esto, como cuando oías a tu papá reírse y aprovechas para pedirle dinero y el carro. La banda Lagunera todavía no terminaba de sacudirse el confeti y ya perdió tres de sus campeones.
Se fueron tres titulares indiscutibles con el entendible argumento la directiva Lagunera decidió agradecer a los futbolistas su entrega y aportación durante el proceso para la obtención del sexto campeonato y cristalizarles sus sueños de emigrar por más fama y dinero fue su recompensa. Néstor Araujo, Carlos Izquierdoz y Djaniny Tavares, tres no sólo inamovibles en la alineación de Siboldi, s no tres estrellas de la Liga MX, difícil encontrar mejores en su posición se fueron. Néstor cumplió a cabalidad cuando dijo que no jugaría en otro equipo en México que no fuera Santos Laguna.
"Cali" cayó en el embrujo de Boca. que tan grande es la institución Xeneize que sigue seduciendo a futbolistas dispuestos a dejar el lujo y confort de los grandes sueldos mexicanos y sacrificando algunos dólares se van a portar felices como niños la playera azul y oro. Djaniny según nos cuentan sólo tenía que aceptar ir al Al-Ahli que hizo efectiva la cláusula de rescisión de contrato, es decir, Santos Laguna si estuviera de acuerdo o no era irrelevante, los árabes pagan la cláusula, Djaniny se quiere ir, fin de la historia.
Un buen de billetes verdes ingresaron a las arcas de la institución comarcana, pero contrario a lo que se cree, no necesariamente este dinero se va a utilizar en refuerzos, la gente elucubra e inmediatamente hace operaciones, tales como: si juntaste veinte millones de dólares fácil te puedes traer tres cracks de seis millones cada uno. Error, la lana proveniente de las ventas de jugadores también es utilizada en los gastos operativos de la organización y ahí se invierte la mayor parte.
Por otro lado, sabemos que no hay descenso los próximos dos años y eso puede relajar a algunos equipos que aprovecharán para bajarle a la inversión y apostarle a sus básicas, pero la tabla porcentual sigue y se supone que a partir de la 2020/2021 vuelve el terror para los rezagados en estos cuatro torneos por venir. Por otro lado, estamos de acuerdo con la raza que se manifiesta en las redes sobre que le está exagerando la dirigencia santista con el éxodo de elementos puntales y la llegada de un central que debutará en México (Martín Nervo) y otra apuesta tipo "Chatón" Enríquez con la llegada de Alejandro Castro, también como Chatón proveniente del ascenso y con la esperanza que encuentre su séptimo aire y sea útil.
Tendrán que llegar mínimo un central, un volante y un delantero más, ¿en qué momento? ¿para este torneo o para el que viene? Eso lo sabremos con el tiempo, de entrada y a juzgar por la pretemporada, el panorama no se ve muy halagador que digamos, hoy mismo en Carson se corre el riesgo de una derrota estrepitosa ante Tigres en el Campeón de Campeones, cierto, igual presentíamos al inicio de la liguilla pasada, pero en ese momento había elementos para cimentar la esperanza, ahora el arranque del Apertura luce, al menos en el papel de regular a malo.
No me gustan mucho los dichos, pero aquí sí aplica el siguiente ante la salida masiva de cracks de los Guerreros: "Ni tanto que queme al santo (s), ni tan poco que no lo alumbre"
