La reunión arrancó en torno a las 10:00 hora local (1:00 GMT) en la franja sur de la zona de seguridad conjunta, en el corazón de la militarizada frontera intercoreana, según confirmó a Efe una portavoz del Ministerio de Unificación sureño. (ARCHIVO)
Las dos Coreas celebran hoy un encuentro de trabajo para analizar y tratar de paliar los graves problemas de deforestación que ha sufrido Corea del Norte, enmarcado en la situación actual de acercamiento entre ambos países.
La reunión arrancó en torno a las 10:00 hora local (1:00 GMT) en la franja sur de la zona de seguridad conjunta, en el corazón de la militarizada frontera intercoreana, según confirmó a Efe una portavoz del Ministerio de Unificación sureño.
Seúl ha enviado al encuentro a una delegación de tres personas liderada por el viceministro a cargo del Servicio Forestal, Ryu Kwang-soo, mientras que el grupo de Pionyang tiene al frente a Kim Song-jun, alto funcionario del Ministerio de Protección Ambiental.
"Trataremos temas de cooperación global en el sector forestal y consultaremos con el Norte posibles métodos de implementación", explicó antes del encuentro Ryu en declaraciones recogidas por la agencia de noticias local Yonhap.
Está previsto que se traten posibles proyectos para ayudar a la reforestación del Norte, cuya geografía aún padece los efectos de la Guerra de Corea (1950-1953) y la hambruna de los noventa, que forzó a talar gran cantidad de bosques para crear suelo cultivable.
Esto aumenta enormemente los riesgos y efectos del temporal de lluvia estival en el Norte, donde las inundaciones periódicas destruyen gran cantidad de cultivos y comprometen la seguridad alimentaria en el país asiático.
Además de posible transferencia tecnológica por parte del Sur para la repoblación o conservación de masas boscosas, podría proponerse un estudio conjunto para evaluar de manera global la condición exacta de los bosques en Corea del Norte.
No existen apenas datos precisos en este terreno, aunque según estimaciones del Ministerio de Unificación de Seúl, la pasada década al menos un tercio de los bosques norcoreanos había sido destruido.
Estas reuniones de trabajo entre las dos Coreas, técnicamente aún en guerra, llegan después de los líderes de ambas, Moon Jae-in y Kim Jong-un, firmaran al término de su cumbre del 27 de abril una declaración en la que se comprometían a reforzar lazos y a trabajar por la paz y la "total desnuclearización de la península".
La cita cimentó el actual acercamiento y el camino para la histórica cumbre que mantuvieron en junio en Singapur Kim y el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en la que los dos se comprometieron a trabajar para que el régimen abandone su programa nuclear si Washington garantiza su supervivencia.
