La Corte Suprema de Estados Unidos concedió ayer una victoria legal al presidente Donald Trump al fallar a favor de su tercer veto migratorio, especialmente contra países de mayoría musulmana. (ARCHIVO)
La Corte Suprema de Estados Unidos concedió ayer una victoria legal al presidente Donald Trump al fallar a favor de su tercer veto migratorio, especialmente contra países de mayoría musulmana (Libia, Irán, Somalia, Siria y el Yemen), lo que puede servir de impulso a su retórica antiinmigración y, de facto, la consolidación de más poderes en este tema.
La decisión de la sala en la penúltima sesión del curso era probablemente la más esperada en la Corte por las implicaciones que pueda tener a la hora de servir como aval a las políticas del mandatario, que ha abanderado consignas antiinmigrantes en la campaña presidencial de 2016 y también desde la Casa Blanca.
El propio Trump no dudó en expresar su entusiasmo por la sentencia mediante su canal habitual, Twitter, en el que citó el posicionamiento de la sala con un breve pero significativo "¡guau!". Posteriormente, a través de un comunicado formal, el presidente calificó de "victoria tremenda" el fallo y volvió a apelar a la seguridad nacional contra el terrorismo.
Este triunfo se da en medio de una andanada de críticas por la política antiinmigrante de Trump que ayer sumó a la demanda de 18 fiscales estatales contra la medida de separar familias en la frontera y el reclamo de México ante la Organización de Estados Americanos (OEA), por la misma razón.
