¿La democracia de quién?
Nací en el 58, para ese año había terminado la segunda guerra mundial, viví la guerra fría en su pleno apogeo y la revolución Cubana triunfando, otras buenas y malas de ese siglo en particular. Extraordinario, para mí. Desde que tengo uso de razón, Solo escuchábamos las bondades de una democracia platónica y su estandarte norteamericano. Como la mayoría de los mexicanos, fui adoctrinado con una ideología muy peculiar. Desde la imagen en los libros de texto, las fanfarreas, trompetas, tambores y siempre engalanando de todos los actos públicos con el huapango de José Pablo Moncayo por los pocos, muy pocos, medios de comunicación controlados por particulares pero influenciados ($) por el estado.
Fuimos adoctrinados con ideologías en donde el capitalismo (¿para quién?) era la única forma de vida para conseguir la felicidad personal y en consecuencia de la comunidad que nos envuelve. La simple idea de coincidir con ideologías marxistas o izquierda era considerada como morbosidad, perversión y actitud anormal. Incluso en los 70´s con el pleno apogeo de la escuela de Milton Friedman (1912-2006) y su economía de shock utilizaron a Chile como modelo para implementar dicha política y justificándola intervención de la CIA para derrocar al gobierno de Allende
Nos sembraron, desde niños, la idea que la única y real democracia era la mexicana, la de Miguel Alemán, brincando a Luis Echeverría y la maravillosa época de abundancia petrolera con López Portillo y hasta la fecha desconocemos una verdadera democracia que en realidad no veo que exista en ninguna parte del nuestro planeta.. Los medios de comunicación controlados ($), solo hablaban de la democracia y su consecuente crecimiento económico, ese desarrollo estabilizador de Ortiz Mena y después la entrada al neo-liberalismo de Carlos Salinas.
Para esas generaciones nos es muy difícil aceptar que pudieran existir otros modelos de convivencia y de orden administrativo en los bienes de la comunidad o mejores políticas públicas, a menos que, leamos o investiguemos un poco más de lo que está frente a nuestras narices.
El modelo marxista – leninista o socialismo, nunca llego a concretarse como la fórmula o ecuación económica -filosófica. Lo mas cercano, para mí, fue la entrada de Lula en Brasil y aun así, nunca pudo aterrizar el modelo. La corrupción en las cúpulas de gobierno se lo impidió. Todo lo demás que se pudiera conocer como socialismo no es mas que dictaduras autoritarias con modelos económicos muy diferentes, pero existentes. En México hemos tenido una dictadura de partido y aunque Felipe Calderón quiso hacer lo posible para cambiar el paradigma no le fue posible el tiempo y el sistema se lo impidieron.
En cuanto al modelo capitalista, repito, creo que todo iba muy bien hasta que Carlos Salinas de Gortari le abriera la puerta al neo-liberalismo, el cual poco a poco se fue minando gracias a la excesiva ambición de poder y dinero de los grandes corporativos nacionales e internacionales, así como la corrupción que se desenfreno. Las grandes corporaciones empezaron a absorber a las más pequeñas. Los inversionistas, a solo desear utilidades a costo de lo que fuera, privilegiaron la contratación de depredadores financieros por encima del bienestar de la comunidad y su entorno.
Si a esta ecuación le agregamos la generación millenians y posteriores, hoy dominantes del mundo no vivieron en carne propia las variaciones económicas y sociales en la segunda mitad del siglo anterior, principalmente en el 68, sin duda vamos a tener unas elecciones abismalmente diferentes a las que hemos vivido. Para ellos el tema de la democracia les es indiferente y les da lo mismo cualquier propuesta que ofrezcan los actuales candidatos, aunque su futuro dependa del proceso electoral.
¿Qué futuro les podemos dejar a nuestros hijos?, ¿Qué democracia queremos para ellos?
Solo mi opinión
Víctor Alducín Flores
Torreón, Coah.
