Obras para locales. El dirigente de la CMIC en Durango señaló que llevaron su reclamo hasta oficinas centrales de la Sedatu, pero no fueron tomados en cuenta.
EL SIGLO DE TORREÓN
Empresarios de la Cámara de la Industria de la Construcción en Durango (CMIC) fueron relegados por la Sedatu en la realización de dos obras ejecutadas actualmente en Durango y Gómez Palacio por empresas foráneas, pese a que en la entidad se cuenta con la infraestructura y equipamiento necesarios.
El líder de los constructores, Miguel Ángel Reveles Pérez condenó que vengan empresas de la Ciudad de México y otros estados a realizar estas obras, cuando en la entidad duranguense hay constructoras locales que pueden hacerlas.
"Estamos defendiendo esto para que todas las inversiones en obra e infraestructura las lleven a cabo las empresas locales, pero se hacen de oídos sordos; hemos llevado nuestra voz al centro del país, pero Rosario Robles (titular de Sedatu), no nos toma en cuenta", agregó.
Destacó que antier miércoles, Rosario Robles estuvo en la capital del estado para la supervisión de una de las obras que se hace en el bulevar Francisco Villa, pero mostró total desinterés para tener contacto con los empresarios duranguenses, al no ser convocados.
Reveles Pérez manifestó que estas obras se llevan a cabo con recursos del Fonden, con 50 millones de pesos en Durango y otros 50 millones en Gómez Palacio, con una total exclusión de la titular de Sedatu, "no hay otra explicación", ya que el delegado en Durango dice ignorar lo sucedido.
Inclusive, argumentó que esta obra se manejó en la Ciudad de México con cierto nivel de opacidad, al desconocer cómo se contrato, pues no se tiene información de cómo se realizó.
Se privilegia el hecho de que en Durango haya obra, "pero en lo que no estamos de acuerdo es que vengan otras empresas de otros estados a hacer lo que en el estado (de Durango) también se puede realizar", dijo.
La empresa que lleva la obra no es de Durango y ya ha contratado los servicios de suministro en algunas empresas locales, pese a que se cuenta con toda la capacidad necesaria, finalizó.
El siglo de torreón
